Ronald Weinland

MÁS SOBRE EL TESTIMONIO DE DIOS

Se dijo recientemente en este blog que no habría necesidad de publicar otras advertencias sobre el fin de los tiempos. Cuando las advertencias anteriores se han escrito, han sido dirigidas principalmente hacia el mundo y la Iglesia que está dispersada.

Sin embargo, sabemos lo que pasa con tales advertencias, como con todas las advertencias que Dios ha dado a lo largo del tiempo. Casi todas las personas simplemente las han ignorado, y sin duda no han creído que venían del Eterno Dios. Ese es el testimonio – el verdadero testimonio para el juicio – de los 6.000 años de historia de la humanidad.

Los únicos que realmente se han beneficiado de estas advertencias son aquellos que están “en” el Cuerpo de Cristo y que no se han separado de él a causa de la falta de arrepentimiento de sus pecados. También están aquellos a quienes Dios ha llamado a través del tiempo y que han aprendido de las advertencias de Dios. Hay todavía otros, con quien Dios ha estado trabajando para realizar un propósito mayor en Su plan. Este también es el testimonio fiel de aquellos que ahora están se beneficiando de las advertencias de Dios.

Ya que estamos en el día profético del Eterno, que es cuando Dios ejecutará Su juicio final, poniendo fin a los 6.000 años de autogobierno del hombre y también al rechazo de la humanidad en escuchar a Dios, no hay necesidad de seguir avisando a nadie de lo está por pasar. El último día profético de Dios tiene que ver con la ejecución de Su sentencia, sin más interminables advertencias que al fin y al cabo son ignoradas. Cuando el juicio del tiempo del fin venga sobre este mundo para castigar y humillar a la humanidad, la Iglesia de Dios sería prudente en recordar que nosotros también seguimos estando bajo el juicio de Dios.

El juicio sobre la Iglesia de Dios, al contrario del juicio de Dios sobre el mundo, no es para castigar la Iglesia sino para salvarla, si estamos dispuestos a ser juzgados por Dios, examinándonos y probándonos a nosotros mismos ante Dios (2 Corintios 13:5 y 1 Corintios 11:28 -32). Por lo tanto, vamos seguir buscando la orientación de Dios, la corrección, la amonestación y la inspiración en el “camino” en que Él nos conduce y nos dirige. Esto determina gran parte de nuestra disposición en estar bajo el juicio de Dios. Es por esta razón que los mensajes de este blog se dirigen ahora más específicamente al pueblo de Dios y los que están siendo atraídos por Él, aquellos que tienen oídos para oír.

1.260 Días de Testimonio
En los últimos cuatro años la Iglesia de Dios ha aprendido mucho más acerca de la definición y propósito de Dios de un “testimonio”. Es bueno recordar el segundo libro que Dios me ha inspirado a escribir en este tiempo del fin y del titulo de este libro, que fue igualmente inspirado por Dios: 2008 – El Testigo Final de Dios.

Muchos se han burlado, mal interpretado y tergiversado el título de este libro. A medida que 14 de diciembre de 2008 se quedaba atrás y avanzábamos en los 1.260 días proféticos de los dos testigos de Dios, incluso algunos en la Iglesia de Dios comenzaron a pensar que este título no era apropiado. Hay una gran lección que debemos aprender acerca de escritos proféticas inspiradas por Dios. Escritos proféticos son proféticos hasta el momento en que se cumplen. Muchos han tenido dificultades con eso por que han creído que este libro era una explicación completa y exhaustiva de la profecía del tiempo del fin. ¡Pero eso no es así! En gran medida, este libro contiene muchos escritos profético que siguen siendo proféticos, pero que ahora son explicados más clara y más ampliamente que jamás habían sido en el pasado.

Dios ha mostrado a Su pueblo que Su palabra es revelada progresivamente. Toda la Biblia está escrita de esa manera. Abraham recibió promesas proféticas y comprensión muy básicas sobre el plan de Dios. Cuando Moisés entró en escena, Dios comenzó a revelarle mucho más de lo que había revelado a Abraham. Luego, en la época de los reyes de Judá y de Israel, Dios siguió revelando más y más a través de los profetas, aunque poco se entendía de lo que escribían, porque casi todo ha sido escrito para ser revelado en este tiempo del fin.

Cuando Jesús Cristo empezó a enseñar y dar aún más detalles acerca de la profecía y del propósito de Dios, las revelaciones de Dios han dado un gran salto hacia adelante. Esto fue seguido rápidamente por los escritos de los apóstoles, con escritos proféticos aún más detallados y la extensa revelación de los caminos espirituales de vida de Dios para Su Iglesia.

Este proceso, que Dios usa para revelar Su voluntad y plan, siempre ha sido progresivo en el tiempo. Cuando una persona comienza a comprender y “ver” este proceso en andamiento, la palabra de Dios se vuelve mucho más emocionante y provechosa. Esto adiciona una nueva dimensión a la belleza y la inspiración de la obra de Dios.

Un Último Testimonio
Esto nos trae a este periodo del fin de los tiempos. Cuando Dios llamó al Sr. Herbert W. Armstrong, en la era de Filadelfia, Dios reveló aún más de Su propósito y plan a través de él. Hacia el final de su vida, el Sr. Armstrong escribió su último libro, Misterio de los Siglos. Este libro describe y expone el plan y propósito de Dios de una manera mucho más concisa que nunca antes.

Cuando llegó el momento para que la profecía de Cristo en Mateo 24:14 se cumpliera, Dios poderosamente esclareció y simplificó Su mensaje (la buena nueva, el Evangelio) para que fuera predicado a todo el mundo. El propósito de Dios en aquellos momentos era revelar más plenamente Su pura verdad al mundo. A pesar de que este mensaje tenga sido simplificado, para que todos pudiesen entenderlo, la manera como la verdad de Dios ha sido recibida ha sido la misma de siempre. La obra que Dios realizó a través del Sr. Armstrong (y la Iglesia de Dios Universal) sirvió para magnificar el testimonio y el motivo para un rápido juicio de Dios, que pronto vendrá, y que será ejecutado justo antes que Su Hijo sea enviado para convertirse en el Rey de reyes.

Fue a partir de las ruinas de una apostasía, que como ha sido profetizado tuvo lugar en la Iglesia de Dios, que Dios resucitó a Su último testimonio en contra de la humanidad. Esa apostasía vino sobre la Iglesia de una manera que nadie ni siquiera podía imaginar, aunque la Iglesia supiera que esta apostasía tendría lugar antes del regreso de Cristo. De la misma manera, la Iglesia también siempre supo que Dios daría un testimonio (los dos testigos), justo antes de la venida de Jesús Cristo. Eso también ha pasado de una manera imprevisible, como nadie, ni remotamente, podía imaginar. De hecho, esto vino de una manera que la mayoría mas bien ha rechazado.

El “camino” por donde Dios nos guía nunca puede ser previsto por el hombre, hasta que Dios lo revele. Dios ha determinado que eso fuese de esa manera con el único propósito de revelar quienes son los que Le siguen en espíritu y en verdad y quiénes no. Sólo Dios puede revelar “Su camino”, y nosotros debemos elegir si Le seguimos o no.

De este modo Dios suscitó un testigo para el tiempo del fin, del medio de un pequeño remanente de la apostasía. No era alguien que tenía preeminencia en la Iglesia. Dios no trabaja con ninguno de los que tenían posiciones importantes en el liderazgo de la Iglesia antes de la apostasía, pero sí con alguien que no era muy conocido y tampoco tenia un alto cargo. No sólo eso, sino que Dios incluso levantó a una mujer como uno de Sus testigos del fin de los tiempos. Esto resultó ser demasiado para muchos de los que están dispersos. Para estas personas era absurdo y ridículo que Dios levantase a dos personas humildes para ser Sus testigos del fin de los tiempos. Eso sin hablar del hecho que uno de ellos fuera una mujer y que los dos fuesen pareja. Es realmente sorprendente cuando esto se ve como lo que es: que las personas presuntuosamente creen que tienen el derecho de decidir lo que Dios puede y lo que no puede hacer, en vez de entender por que Dios hace lo que Él quiere.

El Juicio que Sigue al Último Testimonio
Durante 1.260 días en este tiempo del fin, Dios dio Su último testimonio en contra de la humanidad, revelando plenamente y magnificando la rectitud de Su juicio final, que será ejecutado antes del regreso de Su Hijo. En este período de tiempo, Dios ha resumido un último testimonio que refleje plenamente los últimos 6.000 años de la verdadera actitud de espíritu del hombre hacia Dios.

La obra principal de establecer un “último testimonio” a través de dos profetas para el fin de los tiempos, que Dios ha levantado para establecer este testimonio en contra de la humanidad, se reflejó también en las vidas de aquellos que hacen parte de la Iglesia de Dios – PKG. Una pregunta que uno debe hacerse, una vez que el testimonio se completó el 27 de mayo de 2012, es: “¿Qué viene después de este testimonio que Dios estableció durante 1.260 días?”

Entender la mayor revelación que Dios ha dado acerca de cómo Él cumple Su palabra profética durante este tiempo del fin, es algo que debería conmoverle en el más profundo de su ser. El testimonio que Dios ha establecido durante los 1.260 días nos condujo directamente al último día profético de Dios, que va del Día de Pentecostés de 2012 hasta el Día de Pentecostés de 2013, como el Día del Eterno, el “día” del juicio de Dios del tiempo del fin sobre la humanidad. Esto es algo increíblemente impresionante en su estructura, significado y cumplimiento. Dios ha planeado meticulosamente la manera cómo Él va a marcar el comienzo de Su Reino, que será establecido para gobernar esta tierra con el regreso de Su Hijo.

Una Otra Gran Lección
Para aquellas nuevas personas, que fueron llamadas durante este período de testimonio de 1.260 días, hay una sobria lección a ser aprendida. Aunque la Iglesia de Dios, a quien Dios despertó después de la apostasía, sea pequeña, Dios ha revelado claramente que el gran número de personas, que Él agregó a Su Iglesia durante ese período profético, ha sido llamado para cumplir otro gran propósito Suyo. Claro que estas personas han sido llamadas y engendradas para hacer parte de la Familia de Dios, hasta que puedan nacer en ella, cumpliendo el gran propósito de Dios. Pero estas personas también han sido llamadas para cumplir otro propósito. Algo que Dios nos está revelando ahora.

No es poca cosa que durante el primer año, en el inicio de los proféticos 1.260 días de testimonio, Dios tenga llamado a un número tan grande de personas para hacer parte de un “cuerpo” tan pequeño, que había continuado desde la apostasía. En ese corto período de tiempo, Dios llamó a más personas, que fueron bautizadas en la Iglesia de Dios – PKG que todas las personas que han sido bautizadas en los tres mayores grupos dispersos juntos.

No es mi intención abordar la validez de los bautismos que vinieron después, sino simplemente demostrar el increíble contraste en lo que Dios hizo con Su pequeña Iglesia. Juntando estos tres grandes grupos dispersados, el contraste en tamaño resulta en una diferencia de uno contra cien. Y este “uno”, es lo que Dios ha engrandecido. Pero Dios ha llamado más personas de lo que esas organizaciones supuestamente han crecido. A esto se añade la realidad de que un gran número de personas en estos tres grupos, son personas de dentro de la propia organización y no del mundo como aquellas nuevas personas a quienes Dios ha llamado para Si.

Dios está revelando que Su otro propósito para aquellos que han sido llamados durante este período profético, es también dar un testimonio en lo que se refiere a la Iglesia de Dios. Del mismo modo que el período profético fue testigo del verdadero testimonio de la humanidad durante los últimos 6.000 años, así también este período que estamos viviendo es testigo del verdadero testimonio de la Iglesia en los últimos 2.000 años. Todo lo que ha pasado a los que Dios ha llamado a lo largo de los últimos 2.000 años, también ha pasado a aquellos a quienes Dios ha llamado durante los 1.260 días de testimonio.

Al igual que Cristo dijo que pasaría con aquellos a quienes Dios llama, el maligno ha arrebatado lo que se había sembrado en el corazón (la mente) de algunos. Otros recibieron la palabra de Dios, como la semilla que cae en las rocas y se emocionaron al principio, sin embargo, no llegaron a estar arraigados en la verdad como debían estar y tan pronto vinieron las pruebas difíciles, ellos tropezaron. A continuación, algunos recibieron la palabra de Dios como la semilla que ha caído entre espinos, y después de un tiempo las preocupaciones del mundo les apartó de la verdad. Afortunadamente, llegado a este punto, la gran mayoría se ha arraigado y crece y produce frutos.

Este último grupo que Dios ha llamado, ha sido más beneficiado por la revelación progresista que les ha sido dada, teniendo una mayor oportunidad de “ver” más claramente, que cualquiera de los que han sido llamados antes de ellos. El “camino” se ha hecho más fácil para ellos porque los que vinieron antes han luchado y allanado el camino delante de ellos, aunque la batalla sigue siendo grande en este mundo en este tiempo del fin. En todo esto, está el testimonio de lo que Cristo dijo que pasaría con aquellos que Dios llama.

Si usted es nuevo en la Iglesia de Dios, porque ha sido llamado después de la apostasía, entonces hay una gran lección que aprender de todo esto. Usted está viviendo como un testigo de los últimos 2.000 años de la Iglesia de Dios. Hemos estado viviendo en los últimos cuatro años todo lo que la Iglesia de Dios ha vivido en las siete eras.

De hecho, este es un momento magnificado en el tiempo, en el que se define claramente quién usted es. Todos deben clamar a Dios para recibir ayuda y siempre poder recibir Su orientación y corrección, y buscar la determinación y la fuerza espiritual para poder seguir hasta el final y ser un testigo fiel y verdadero de la venida de Jesús Cristo.