Ronald Weinland

GUERRA EN EL MUNDO

En septiembre de 1969, fue bautizado en la Iglesia de Dios, y en 1981, fue ordenado en el ministerio de la Iglesia de Dios. Desde entonces, he sido testigo de grandes luchas espirituales en la vida de los hermanos y en la vida de la propia Iglesia. El pueblo de Dios (individualmente) y la Iglesia de Dios (el cuerpo espiritual y la organización estructural) ha sido objeto de constante ataque espiritual a través del tiempo. Satanás odia a Dios, a Su Iglesia, y Su plan para el Reino de Dios.

Sabemos y creemos que ahora estamos llegando a la última fase de este tiempo del fin. Creemos que estamos a punto de presenciar la última guerra del hombre – la Tercera Guerra Mundial. El pasado fin de semana la retórica de Corea del Norte e Irán se ha intensificado, y en algún momento se producirá algún incidente en el mundo que desencadenará una rápida escalada de acontecimientos, empujando al mundo a una guerra nuclear. Este es un pensamiento horrible, pero es nuestra realidad.

En los noticiarios de la semana pasada se podía oír por todos los lados un montón de bromas sobre la capacidad de Corea del Norte para atacar a Estados Unidos con misiles nucleares. En su mayoría, esas bromas han descartado y ridiculizado esa posibilidad. Sin embargo, otra fuente de noticias ha sacado a la luz que Corea del Norte realmente posee la capacidad de poner un satélite en órbita, (como lo hizo en diciembre) que pasa por el Polo Sur a una altitud de 300 millas, y que podría llevar un dispositivo nuclear. Este informe afirma que si un solo dispositivo explotase en Omaha, Nebraska, eso podría generar un pulso electromagnético de gran alcance, o EMP, que podría colapsar toda la red eléctrica y otras infraestructuras críticas de Estados Unidos. Corea del Sur ha advertido a los EE.UU. de que Corea del Norte ha estado trabajando en una potente ojiva EMP, con la ayuda de Rusia. Fuentes militares de China afirman que Corea del Norte posee tales ojivas y también afirman que los datos de las pruebas nucleares de Corea del Norte son compatibles con las pruebas de una potente ojiva EMP. Se ha confirmado que si tal dispositivo explotara sobre Omaha, eso sería suficiente para crear un EMP de costa a costa en los EE.UU. Un ex embajador y director de la Organización de Iniciativa de Defensa Estratégica dijo que, si tal dispositivo explotara en Omaha, eso cubriría a todo el territorio continental de los EE.UU. con efectos EMP, lo que tendría como consecuencia inmediata la muerte de millones de estadounidenses y el fin de nuestra forma de vida.

Vivimos en un tiempo inestable, cuando a cualquier momento el primer artefacto nuclear puede explotar, seguido de muchos más. El mundo ahora está a punto de sumergirse en la Tercera Guerra Mundial, pero la Iglesia ya ha estado experimentando una guerra mundial desde hace algún tiempo. Cuando pasó lo de la apostasía, el primer sello de Apocalipsis fue abierto y luego una gran batalla espiritual vino sobre la Iglesia de Dios en todo el mundo. Yo hablé anteriormente sobre los años que llevo en la Iglesia y en el ministerio y de cómo he sido testigo de grandes batallas espirituales, pero lo que la Iglesia de Dios está experimentando ahora es, de lejos, el ataque más poderoso y continuó que yo he visto a lo largo de todos mis años en la Iglesia de Dios. Algunos se preguntarán cómo puede ser que en este momento estemos enfrentado uno de los más grandes ataques espirituales, cuando en 1994 más de 60.000 víctimas han caído rápidamente como resultado de la apostasía, y más de 30.000 han sido dispersados, mientras luchaban para permanecer con vida. Durante aquel tiempo hubo un gran poder espiritual y falsos señales y prodigios, que trabajaban con el objetivo de devastar a la Iglesia de Dios. Pero la realidad es que toda la Iglesia estaba tan débil y tibia espiritualmente, y tan llena de orgullo, que Dios no la aceptaría por más tiempo en esa condición. Por lo que en la apertura del primer sello, Él quitó Su presencia de la Iglesia y la vomitó de Su boca .

Y estando separada de Dios, una vez que Él y Su Hijo ya no “habitaban en” la iglesia, ella pasó a ser una presa fácil para Satanás y el mundo demoníaco, ya que esta separación fue seguida de inmediata demostración de poder (poder espiritual demoníaco), falsos señales y prodigios dentro de la organización de la Iglesia de Dios Universal.

Entonces, ¿cómo puede ser que en estos momentos estemos enfrentando una guerra espiritual más grande y un mayor ataque de ese mundo demoníaco en la Iglesia de Dios que en aquel entonces? Durante la apostasía, Dios ha dejado de habitar en la Iglesia. La Iglesia estaba sin la fuerza espiritual, sin el poder y sin la protección de Dios. Sin embargo, ¡la Iglesia de hoy no es débil! Desde 1969, nunca he visto la Iglesia tan espiritualmente fuerte y unificada como la veo ahora. Algunos pocos pueden sentirse de otra manera, pero eso sólo puede ser el resultado de su corta experiencia en la Iglesia de Dios y/o su debilidad espiritual en este momento. Yo sé lo que he visto, y ese testimonio es de Dios, y es verdadero.

Durante los últimos meses, con base en mi experiencia personal y lo que oigo de las experiencia de tantos hermanos, puedo afirmar que no ha habido un momento, en toda mi vida en la Iglesia de Dios, en el que Satanás y los ataques del mundo demoníaco sobre la Iglesia de Dios han sido tan frenéticos como ahora. Esto es simplemente un testimonio del tiempo en que vivimos y de la realidad de que esos seres saben que su tiempo está casi terminando.

A pesar de que por un lado estos ataques están fortaleciendo a muchos, por otro lado ellos se tornan cada vez más fastidiosos y espiritualmente agotadores, lo que es peligroso. Si la Iglesia no estuviera tan fuerte ella ya habría sido devorada hace mucho. Pero el pueblo de Dios está decidido, perseverante y sigue en la batalla que tiene ante si, y no se da por vencido. Esta es una batalla que sigue hasta el final, cuando Dios enviará a Su Hijo, en Su Reino. Hasta ahora hemos tenido muy pocas bajas, pero todavía hay unos cuantos que están débiles y no sobrevivirán si no cambian algunas cosas en su vida espiritual y no son cautelosos, poniendo en práctica lo que se ha escrito en las últimas entradas y en las cartas al ministerio, ya que eso incluye también a unos pocos en el ministerio.

Un Ayuno Urgente
Visto que esta batalla espiritual tiene sido muy larga, y el objetivo de todo eso es que nos cansemos de luchar, debemos hora luchar con más ahínco y seguir adelante espiritualmente, más que nunca antes. Este es el momento para que toda la Iglesia, en todo el mundo, ayune, para que podamos ser fortalecidos con mayor poder de lo alto – poder contra el cual Satanás no puede luchar. Satanás y sus demonios pueden luchar contra el reino angélico y pueden atacar al pueblo de Dios, pero no pueden atacar a Dios y el poder de Su Espíritu Santo en nuestras vidas. Este poder – el poder del Espíritu de Dios en nosotros – es nuestro poder y nuestra fuerza, que nos fortalece contra los ataques y nos capacita para seguir luchando contra ese reino espiritual maligno, hasta el día en que ese reino sea llevado al cautiverio.

Consciente de todo eso, he citado a menudo un poderoso versículo de las Escrituras:

“Hijitos, vosotros sois de Dios, y los habéis vencido (del griego: conquistado); porque mayor es el que está en vosotros (Dios Todopoderoso y Jesús Cristo), que el que está en el mundo (Satanás y sus demonios)”. ( 1 Juan 4:4).

Como Iglesia de Dios, vamos a seguir luchando en esta batalla, porque Dios derramará más fuerza y poder sobre nosotros y en nosotros. Vamos ayunar en el próximo fin de semana. Para la mayoría de nosotros, el próximo Sabbat es el momento ideal para este ayuno. Sin embargo, también se puede ayunar el domingo. Usted elige cuando quiere ayunar. Si usted no esta recibe información sobre el ayuno antes del fin de semana, de modo que pueda ayunar junto con nosotros, usted deberá ayunar tan pronto como sea informado sobre eso.

Siguiendo las instrucciones de Isaías 58, primero clamamos a Dios por el perdón de nuestros propios pecados y también pedimos Su ayuda para que podamos ver el pecado en nosotros mismos, para el cual estamos ciegos. Luego, cuando Dios nos ayude a ver aquello que sólo Él y Su Hijo pueden ver, nos arrepentimos. A continuación, vamos a seguir clamando (según las mismas instrucciones) para que Dios nos cubra con Su fuerza y poder, para que podamos estar llenos de ese espíritu de lucha de Isaías 58, enflaqueciendo el poder de Satanás (el poder de subyugar, engañar, y mantener en cautiverio a causa del pecado humano).

Somos pequeños y pocos, y un mundo espiritual hostil está a punto de ser encadenado y encarcelado, aunque en estos momentos ellos sean más que nosotros. Pero el poder de Dios en nosotros les hace pequeños y les debilita, reduciéndoles a nada. Esta es una gran guerra y debemos estar sobrios en lo tocante a ella, y así, diligentemente, estar vigilantes y combatirla. Porque nuestra Petra es el Omnipotente y Todopoderoso, contra quien nada puede subsistir. Nosotros seguimos adelante.