Ronald Weinland

Estamos a punto de entrar en la etapa de cambio más intensiva en toda la historia de la humanidad, y aunque que todo ese cambio se produzca como consecuencia de terribles acontecimientos catastróficos, no tendrá absolutamente nada que ver con el que pronto probarán ser “las falsas interpretaciones” del calendario de los Maya .

Ha habido un gran despliegue mediático acerca del calendario de los Maya, y por suerte, después de este Viernes, 21 de diciembre de 2012, esa exageración llegará a su fin. Esto me recuerda a algo que escribí hace exactamente 13 años, cuando yo estaba explicando cómo la “fiebre” del milenio tampoco resultaría en nada. El tema del milenio se abordó en una de nuestras antiguas publicaciones, News Watch, en un artículo cuyo título es al mismo tiempo la pregunta, “¿Es eso el fin?”

En ese artículo se explica que por aquel entonces nosotros aún no nos encontrábamos en el momento que es proféticamente llamado de “el tiempo del fin.” Sin embargo, aquí estamos, trece años más tarde, a finales del año 2012. Y ahora no solamente nos encontramos en ese “tiempo del fin”, sino que también estamos a punto de entrar en su fase final.

La “fiebre” de Satanás también está llegando a su fin
En se tratando del fin de las “fiebres”, lo mismo irá ocurrir con la influencia de Satanás sobre la humanidad en los últimos 6.000 años. Su tiempo de exagerar y promover sus engaños mentirosos también está llegando rápidamente a su fin. Durante los últimos 6.000 años religiones, economías y gobiernos han estado practicando sus engaños y éstos han causado solamente confusión y un gran sufrimiento en la tierra. Es por eso que Dios se refiere a la destrucción final de este sistema como la caída de Babilonia.

Dios ahora está empezando a hacer una diferenciación entre los engaños mentirosos y la verdad. A través de los tiempos, Satanás ha tenido un perverso placer en engañar el hombre con varios escenarios y falsas profecías acerca de un fin destructivo para la humanidad. Sin embargo, la verdad que Dios revela es que el propio Satanás y su poder seductor e influencia sobre la humanidad están llegando a su fin.

Ninguna credibilidad será dada a la idiotez de que el calendario Maya prevé la destruición de la humanidad, pero después del 21 de diciembre, Dios comenzará a dar credibilidad a Sus profecías sobre el verdadero “fin de los tiempos”, una vez que la Segunda Trompeta del Apocalipsis suene. La burla de Satanás y sus falsos alarmas sólo sirven como canción de cuna, para mantener la humanidad en un sueño más profundo y en la incredulidad con respeto aquello que es verdaderamente de Dios. Hay un verdadero “fin de los tiempos” para la humanidad. Pero no se trata del fin de la raza humana, sino del fin de la autonomía del hombre y el principio del verdadero gobierno de Dios sobre la humanidad, que ciertamente continuará existiendo en la tierra, una vez que el profético “tiempo del fin” haya terminado.

El hecho de que los más espantosos y catastróficos acontecimientos del “tiempo del fin” aún no hayan ocurrido es una prueba del poder de Dios para disminuir la influencia engañosa de Satanás sobre la humanidad. La diferencia entre el verdadero poder de Dios y el poder de Satanás es demostrada claramente mediante el poder de Dios para cumplir Su palabra profética, sin las distorsiones, engaños y burlas de Satanás.

Los acontecimientos del tiempo del fin están a las puertas. Y ésta es la razón por la cual hay un cambio en el enfoque y el propósito de las publicaciones en este blog. Esa es la razón de la frase final de la última entrada: “¡El tiempo para los avisos ha terminado, porque el tiempo del cumplimento ha llegado!”