Ronald Weinland

UN PENTECOSTÉS QUE SE ACERCA RÁPIDAMENTE

Al empezar a escribir esta entrada en el Sabbat, me estoy acercando al final de un ayuno de toda la Iglesia. Nos hemos centrado en nuestra necesidad individual de nos arrepentir de nuestros pecados, y también hemos dado el siguiente paso, pidiendo a Dios que nos muestre más pecado en nosotros mismos – pecados que no somos capaces de ver fácilmente.

Nuestro deseo, como pueblo de Dios, es deshacernos de toda levadura en nuestras vidas y hacernos más humildes a fin de crecer en una mayor unidad y conformidad con el camino perfecto de Dios – con el propio Dios. Entendemos que crecer en esta unidad es un largo proceso, que dura toda la vida, el cual debemos abrazar continuamente y someternos a él.

Nuestra manera de vivir abarca un proceso continuo que nos permite crecer espiritualmente, cada vez más cerca de Dios, porque Él nos revela el pecado en nosotros y nosotros elegimos nos arrepentir continuamente, cuando Él nos lo revela. Nuestro evangelista en Australia, Wayne, dio un sermón el pasado Sabbat, titulado, “A Way of Life” (Un modo de vida). Sería bueno citar parte de lo que se abordó en ese sermón, ya que habla de la importancia de buscar el favor de Dios (especialmente como lo hicimos en ayunas) para ver el pecado, para el cual estamos ciegos.

Aquí la mención de este sermón: “Si no vemos el pecado o faltas espirituales, ¿cómo podemos escoger por cambiar? Entonces, ¿cómo podemos elegir a arrepentirnos si no somos capaces de ver el pecado? Si pensamos que estamos en lo cierto y Dios no revelael pecado para nosotros, vamos a seguir en el pecado por el resto de nuestras vidas. Dios tiene que cambiar la manera de pensar del hombre, para que el hombre pueda hacer parte de Elohim”.

Aunque siempre usamos Isaías 58 como nuestra guía cuando ayunamos, cuando cada uno de nosotros busca se arrepentir y estar en mayor armonía y unidad de espíritu con Dios, este ayuno que hoy hicimos también ha tenido otro objetivo importante. No hemos ayunado solamente porque deseamos tener a Dios y a Jesús Cristo habitando más plenamente en nosotros para estar más fortalecidos contra un mundo espiritual maligno, sino que también hemos ayunado con el propósito de buscar a Dios para que Él debilite cada vez más el poder de Satanás y del mundo demoníaco, hasta el día en que sean espiritualmente confinados por 1.000 años. La eliminación de Satanás y los demonios ayudará a cumplir, de la manera más poderosa, lo que es retratado espiritualmente en Isaías 58, en lo tocante a la humanidad.

Ahora estamos a sólo unas semanas del Pentecostés y de nuestra esperanza de que Jesús Cristo regrese como el Mesías gobernante – el Cristo. Hay aún muchas cosas que deben se cumplir y muy poco tiempo para que esto ocurra. Pero “por ahora”, como siempre, seguimos adelante y luchamos contra aquello que lucha contra Dios. De acuerdo con la presente verdad, estamos todavía enfocados en el completo cumplimiento de Pentecostés, en una forma grandiosa.

En la última entrada, escribí sobre una guerra espiritual, a nivel mundial, y quedó claro que había necesidad de este ayuno como Iglesia, en todo el mundo. Como estábamos más enfocados con este ayuno en un maligno mundo espiritual, Dios nos ha dado más aclaraciones respecto a nuestra comprensión en el pasado y la comprensión que ahora tenemos de las Trompetas del Apocalipsis. Esto me recuerda una reciente entrada en la que escribí que la manera progresiva como Dios hace revelaciones a Su Iglesia se asemeja a un rompecabezas, donde continuamente se añaden piezas, enseñando de modo cada vez más nítido lo que Dios está llevando a cabo. Al igual que con cualquier rompecabezas, a veces intentamos encajar una pieza (o piezas) en el lugar equivocado cuando Dios revela la verdad a nosotros, pero no revela todo sobre algunos aspectos específicos de esta verdad. Es un proceso de acercarnos para cada vez más a Dios en la verdad, mientras seguimos la “presente verdad” que Él nos ha revelado en ese momento en el tiempo. Este proceso también es utilizado por Dios para probar y moldear a Su pueblo. Eso es como en el importante ejemplo de la vida del Sr. Herbert W. Armstrong, cuando Dios le reveló la verdad sobre los Días Sagrados, incluyendo el Pentecostés, pero ha tardado casi 40 años para que Él revelase el momento correcto para observar Pentecostés.

El ejemplo de intentar encajar algunas piezas en el lugar equivocado cuando Dios nos revela la verdad, ha sido especialmente cierto en los últimos años, donde la cronologíaha sido un factor importante. Este ha sido el caso, cuando se inició el trabajo de los dos testigos. La revelación de quiénes eran era cierta, pero luego Dios reveló que su tarea sólo empezaría más tarde. Aunque sabíamos que la cuenta atrás para el regreso de Cristo había comenzado, no sabíamos que el “timing” de Dios alteraría esa cuenta hasta que Él reveló que Cristo volvería en un día de Pentecostés y no en una Fiesta de las Trompetas. Cuando llegamos al día de Pentecostés en 2012, hemos tenido que ajustar otra vez la cronología cuando Dios nos reveló que habíamos entrado en el “Día del Eterno”. Una vez más, la imagen de lo que Dios estaba haciendo se hizo más nítida, ya que algunas piezas del rompecabezas simplemente faltaban o habían sido colocadas en el sitio equivocado. Todo eso está totalmente bajo el control de Dios, Él determina que verdades Él nos revela y cuando lo hace.

Por el bien de este mundo y por el bien del pueblo de Dios, que ha estado luchando una larga y extenuante batalla, creemos que hemos llegado al punto en que ya no hay más piezas importantes que estén fuera de lugar. Una vez más, este proceso de cómo Dios revela la verdad nos enseña mucho sobre la manera como Dios ha guiado Su Iglesia y sobre el proceso a través del cual Dios nos ha probado y depurado (por el fuego). Sea lo que sea que tengamos por delante, seguiremos avanzando, sin nunca abandonar la lucha.

El Preludio de la Tercera Guerra Mundial
Después de nos dar recientemente una comprensión más significativa sobre el uso del término “Asiria” para este fin de los tiempos, junto con un fuerte sentido de la realidad sobre una gran batalla espiritual que se ha estado librando contra la Iglesia de Dios, Dios ahora nos está dando una visión más clara del significado contenido en las Trompetas del Apocalipsis. En los últimos años, Dios nos ha estado revelando cada vez más acerca de estas trompetas. Una de las cosas que Dios nos ha revelado se refiere a la relación entre el momento en que una trompeta es tocada y el momento en que los acontecimientos descritos en los versículos de las Escrituras concernientes a esta específica Trompeta, tienen lugar.

Las descripciones de las trompetas no están escritas de una manera simple, para que cualquier persona pueda leer y entender la verdad acerca de la cronología o del orden contenidos en ellas. Esto también pasa con las parábolas, las profecías, y en realidad con la propia Biblia. Dios tiene que revelar el verdadero significado de todo. Es el propósito de Dios que ni el hombre ni el mundo de los espíritus se enteren de lo que está escrito hasta que el propio Dios lo revele. Esto es especialmente cierto en lo que se refiere a manera como Dios trata con Satanás y con el mundo demoníaco en este tiempo del fin.

En otra entrada reciente, si hizo la pregunta que si sabíamos a ciencia cierta que la Segunda Trompeta ha sonado o no a principios de abril. Eso no lo sabemos. Dios no ha revelado cuando las trompetas serán tocadas, a excepción de la primera y la última. Dios ha inspirado que eso fuera escrito de tal manera que no vamos a saber hasta que estas cosas ya hayan ocurrido. Dios también ha revelado que hay muchos eventos que se superponen y se entrelazan en el cumplimiento de estas trompetas.

Dios no nos ha revelado esto, pero puede ser que las siete trompetas hayan sonado en el comienzo, poniendo en marcha las cosas que han de ser cumplidas por cada una de ellas. Todavía no lo sabemos, pero debemos entender que no se puede ordenar eso de ninguna otra forma, diferente del orden numérico y específico que Dios ha ordenado las trompetas. Como seres humanos, primeramente físicos, por lo general tratamos de razonar de acuerdo con los limitados parámetros físicos, en el intento de poner todo en su sitio, en una manera agradable, perfecta y ordenada. Hay orden en todo eso, pero sólo en la medida en que Dios lo estableció, conforme Su propósito.

Habiendo dicho todo esto, hemos estado esperando, con el limitado conocimiento que tenemos, a que los efectos de la Segunda Trompeta fuesen manifestados de manera que pudiésemos ver más claramente dónde estamos en el tiempo profético y entender la secuencia de los acontecimientos. Pero Dios nos está enseñando que la simple observación de lo físico no revela tales asuntos. Esto es similar a un conocimiento limitado que Dios ha dado acerca de la descripción de la Sexta Trompeta. Esta trompeta abarca un reciproco y masivo ataque nuclear, que no tendrá lugar hasta que estemos muy cerca del final. Es debido a este conflicto (Armagedón) que Dios tendrá que intervenir rápidamente, con los acontecimientos de la Séptima Trompeta, para detener esta guerra. Sin embargo, los acontecimientos de la Sexta Trompeta se ha puesto en marcha en “una hora, un día, un mes y un año” específicos, (Apocalipsis 9:15), antes de que realmente se produzcan. Dios está revelando ahora a la Iglesia que la Quinta Trompeta es de veras el preludio de la Tercera Guerra Mundial.

La Quinta Trompeta
Cerca de un año atrás, he dado un sermón abordando algunos de los acontecimientos de la Quinta Trompeta que no encajaban en el rompecabezas. Esta parte de la imagen aún estaba turbia para nosotros y Dios comenzó a ayudarnos a ver que había algo más que necesitábamos entender. Pero eso ha sido sólo el comienzo de Su revelación de más verdades sobre este tema. Es realmente una manera hermosa la que Dios usa para revelar progresivamente la verdad para nosotros, siempre nos guiando hacia una mayor unidad y conformidad con Él. Yo siempre me quedo fascinado cuando veo el proceso de construcción en acción, cuando una pieza es puesta primero en su sitio antes que otra pueda ser construida (añadida) sobre ella.

En las últimas entradas, Dios nos ha estado guiando hacia esta presente entrada. Nuestro Padre nos ha mostrado que no hemos comprendido plenamente el empleo del término “Asiria” en la profecía. En este tiempo del fin, este término no se refiere específicamente a Alemania, así como el término “Egipto” no se refiere literalmente a ese país. En el pasado, durante las Eras de Filadelfia y Laodicea, creíamos que Israel seria llevado cautivo por Alemania (Asiria), en lugar de comprender que aquí se trata de un cautiverio por una forma de gobierno que ha conquistado a los pueblos dispersos de Israel. En la interpretación física de este hecho, esta pieza del rompecabezas parecía encajar en la Quinta Trompeta. A pesar de que sea bajo el liderazgo de Alemania que el euro y la Unión Europea estén sacando a la luz el tipo de cautiverio que vino sobre Israel, la Quinta Trompeta tiene que ver realmente con la Iglesia de Dios, tanto con el remanente como con los que están dispersos. La participación de Alemania tiene que ver con los eventos que ocurren durante el cumplimento de la Primera Trompeta, como resultado del resurgimiento del antiguo Imperio Romano.

El gran significado de la Quinta Trompeta tiene que ver con una guerra espiritual en este tiempo que estamos ahora. Se trata de un poder que ha sido desatado por el mundo demoníaco. No obstante, hay restricciones específicas para ese mundo espiritual, que es controlado por Dios. Recientemente, nuestro sénior evangelista, Johnny, ha dado una serie de sermones, con cuatro partes, sobre el tema de la última jornada de Cristo hacia el día del Pésaj. En ese sermón, se hizo referencia a las escrituras que revelan que hubo una gran guerra demoníaca contra Cristo en aquel momento. Dios tenia un gran propósito en permitir eso, pero lo que podía y lo que no podía pasar, siempre estuvo bajo Su control.

Lo mismo se pode decir de Satanás y sus demonios, en esta batalla final antes del Milenio, en su lucha contra Dios. Dios les ha permitido perturbar el mundo por un tiempo determinado y finalmente llevar a la humanidad a una última guerra. Pero por ahora, están muy limitados en los daños que pueden causar durante ese periodo de cinco meses, hasta que Dios les permita influir en los últimos acontecimientos catastróficos. El hombre, por sus propios hechos y en un momento determinado, podría empezar una gran guerra que terminaría con toda la vida en la tierra, pero Dios tiene bajo control todos los plazos para el cumplimento de su propósito final: la salvación. Entender lo que el mundo y la Iglesia han estado experimentado en los últimos meses nos ayudará a entender el significado de esta Quinta Trompeta. Como no puedo explicar esto con más detalle en una serie de sermones, daré sólo un resumen de esto en la presente entrada.

Los ataques al pueblo de Dios
En los últimos meses la Iglesia de Dios ha estado experimentando algunos de los ataques más masivos de todos los tiempos, por parte del mundo espiritual demoníaco. Dios ha permitido esto para servir de testimonio a Su iglesia remanente, que ha crecido en fuerza espiritual y ha estado luchando vehementemente contra este perverso abuso de ese mundo espiritual. Como he escrito en la última entrada, la diferencia entre la condición espiritual de la Iglesia de Dios hoy y la condición espiritual de la Iglesia cuando pasó lo de la apostasía y estos seres derrotaron fácilmente a un gran número de hermanos, es tan grande como la diferencia entre el día y la noche. Sin embargo, en los últimos meses, como Dios ahora está habitando más plenamente en Su pueblo, este ejercito demoniaco no ha podido derrotar el pueblo de Dios. Este es un testimonio impresionante del cuerpo espiritual de Cristo hoy en día. Al igual de impresionante que el testimonio que Jesús Cristo dio con su propia vida, hacia el final de la misma, manteniéndose firme contra ese poder con dignidad, honor y gracia, como el sacrificio del Pésaj por la humanidad. Estas son cosas que el mundo demoníaco no puede comprender, y tampoco lo comprenden las personas que se guían por la naturaleza humana egoísta. Sólo Dios puede revelar la importancia, el propósito y hermoso significado de todo eso.

Hemos estado en una batalla espiritual tan grande que ha sido necesario convocar un ayuno de toda la Iglesia, a nivel mundial, clamando por la intervención de Dios, para que pudiésemos ser fortalecidos y hacer frente a todo esto. Fue durante este ayuno que Dios reveló lo que hemos estado viviendo. El mundo demoníaco siempre ha luchado sin treguas contra Dios y Su propósito para la vida humana. Ha habido momentos en que estas batallas han sido más intensas, como el que hemos vivenciado recientemente. Los que son nuevos en la Iglesia de Dios han sido el blanco principal, pero en su mayoría, ellos se han mantenido firmes. Algunos miembros de la Iglesia, que tienen más experiencia en la batalla, no han sido atacados tan severamente como los demás. Sin embargo, hay algunos en la Iglesia de Dios, que mismo teniendo gran experiencia en batallas, fueron atacados por todos los flancos, en un esfuerzo sistemático, porque son una parte de la estructura primaria de la Iglesia y por eso han sido el blanco de estos ataques. Una vez más, el mundo demoníaco está perdiendo la batalla contra Dios, como siempre ha pasado, a lo largo del tiempo.

La descripción de este período de cinco meses, en Apocalipsis 9, ha sido mal traducida, ya que los traductores no conocían la intención (la esencia) de lo que ha sido escrito originalmente. Las traducciones de un idioma a otro no se pueden hacer simplemente palabra por palabra, pero deben ser realizadas captando la esencia del verdadero significado contenido en las palabras. No es difícil leer la interpretación personal en esa traducción.

La descripción de estos seres, emergiendo del abismo, se refiere al ejército de demonios y a Satanás, que es su rey. Dios les permite emerger y usar su poder por última vez durante la fase final de este período de 6.000 años.

El mundo demoníaco no comprende lo que Dios les permite hacer y tampoco entiende que no puede hacer más daño de lo que se le permite. Esto es igual que cuando Dios les permitió incitar a los que dieron muerte a Su Hijo. Los ángeles que seguían fieles a Dios fueron impedidos de intervenir en ese momento, aunque el propio Cristo podría haber llamado a legiones de ángeles para luchar por él. Pero en su lugar, se sometió a los sufrimientos, que eran necesario para cumplir con el propósito y la voluntad de Su padre en lo que se refiere al sacrificio del Pésaj.

En los últimos meses, el objetivo de este malvado ejército ha sido doble. En primer lugar, se ha levantado en contra del remanente de la Iglesia de Dios y en contra de los que han sido dispersados a causa de la apostasía. En segundo lugar, su blanco es el mundo. Pero de eso hablaremos más adelante en este artículo.

La Iglesia y los que Fueron Dispersados
Durante este período de cinco meses, a estos seres demoníacos se les ha dado poder para atacar, herir y acosar mentalmente “sólo a aquellas personas que no tienen el sello de Dios en sus frentes” (Apocalipsis 9:4). Esto, en su contexto, no tiene nada que ver con las personas en el mundo, pero se refiere al pueblo de Dios. Aquí se hace una distinción en lo tocante a los que tienen el sello de Dios en sus frentes. Estas personas son los que serán resucitados como parte de los 144.000 y no pueden ser “heridas”, mismo que pierdan literalmente sus vidas físicas, porque estarán en la primera resurrección. Aunque este mundo demoníaco ha atacado a muchos de ellos, no les podía “hacer daño”, por que ellos son parte del plan de Dios y porque ellos ya han sido sellados, una vez que ya han sido probados y han demostrado que siempre se mantendrán firmes, hasta que sean transformados.

Luego están las otras personas que hacen parte del remanente (de la Iglesia) que han sufrido más porque la mayoría de ellos son nuevos en el cuerpo. Sin embargo, como un testimonio de Dios, la mayoría se ha mantenido firme. Este mundo demoníaco también ha hostigado y atacado a muchos de los que están dispersos, a aquellas personas que Dios está preparando para hacer parte de los 63.000 y que eventualmente podrán se beneficiar de lo que han estado experimentando, mismo que ahora no sean conscientes de eso.

En el versículo cinco está escrito que: “No se les permitió que los mataran”. Dios no permitió que más aflicción que este tormento y dolor fuese lanzada sobre la Iglesia (tanto sobre el remanente como sobre los que están dispersos), ya que la mayoría de ellos vivirán en una nueva era.

El Mundo
La primera parte de este ataque doble del reino demoníaco vino sobre la Iglesia, y la segunda parte tiene que ver con su ataque sobre el mundo, ya que su objetivo es destruir tanto cuanto les sea posible de la creación de Dios, incitando a la humanidad a una extremamente destructiva guerra nuclear. Ese es su motivación y su propósito. Pero desde hace cinco meses, Dios ha estado reteniendo acontecimientos que, si así no fuera, ya hace mucho nos hubieran llevado a la Tercera Guerra Mundial. El momento para los acontecimientos está bajo el control de Dios y lo que Él ordena es lo que sucede: “… pero con la orden de no dañar la hierba ni los árboles…” (Apocalipsis 9:4). Esto tiene un significado literal y tiene significado profético, al igual que con la Primera Trompeta.

Es bastante extraño que el sistema económico de este mundo, y especialmente lo de los Estados Unidos, todavía se mantenga de pie, y no haya colapsado aún. Ahora bien, es fácil entender por qué eso es así. La verdad en todo esto es que el “timing” lo determina Dios. Gran parte de Su propósito en todo esto tiene que ver con los medios que Él usa para causar el mayor y más humillante impacto posible sobre los pueblos dispersos de Israel. Por orden de Dios la destrucción masiva también ha sido frenada. Esta destruición tendrá lugar, en el tiempo determinado por Dios, al final de todo eso. Cuando el período de cinco meses termine, estos seres tendrán un gran poder para influir en los últimos conflictos, que destruirán gran parte de esta tierra. Es por esta razón que las naciones han estado haciendo amenazas y afilando sus espadas, pero nada significante ha pasado.

En medio de estos versículos acerca de esta trompeta hay un versículo que ha sido torpemente traducido y que se refiere al mundo, sin tener nada que ver con la Iglesia:“Durante ese tiempo la gente intentará morir, pero no lo conseguirá; deseará la muerte, pero ésta huirá de ellos.” (Apocalipsis 9:6). Sin tomar mucho tiempo para analizar a fondo todo el significado contenido en algunas de estas palabras y la mala interpretación de ellas, sólo voy a dar una visión general de lo que se trata.

No se trata de personas que de una forma o de otra están intentando quitarse la vida, sino que tiene que ver, en parte, con la locura de muchos que desean empezar una guerra (que al fin y al cabo también les quitará la vida), pero que no han podido lograr eso todavía. Ellos están siendo impedidos por Dios, pues de lo contrario, este ejército demoniaco ya hubiera lanzado al mundo en una guerra nuclear. Hay hombres que tratan de empezar esta guerra, pero realmente no tienen la más mínima idea de la devastación que seguirá, como consecuencia de sus tontas intenciones.

Al igual que en Su perfecto tiempo Dios ha conducido los acontecimientos a la perfección hacia un momento muy específico y exacto, cuando Jesús Cristo fue colgado en un madero, también en el perfecto tiempo de Dios, Él va a intervenir y evitar que el hombre aniquile a sí mismo, para que muchas personas puedan seguir con vida en el Milenio.

Al igual que Dios tenia un perfecto “timing” para el sacrifico del Pésaj, Él también tiene un perfecto “timing” para llevar al mundo a ese momento específico y exacto, cuando comience Pentecostés.

Visto que esta entrada tiene que ser enviada de inmediato, no tengo tiempo para abordar los temas de las Segunda, Tercera y Cuarta Trompetas, que serán cumplidas por acontecimiento que ya han sido puestos en marcha. Los efectos del toque de estas trompetas se manifestarán al final de este período de cinco meses. Eso también incluye el resurgimiento rápido y definitivo del poder del antiguo Imperio Romano, que será de corta duración, pero que producirá resultados devastadores para todo el mundo, incluyendo a los Estados Unidos.

El mundo demoníaco ya empezó a empujar a la humanidad a su última guerra y también ha estado librando una gran batalla espiritual contra el pueblo de Dios. Este es realmente un gran “ay” para la humanidad. El pueblo de Dios está siendo fortalecido a través del sufrimiento en la batalla, y el mundo está a punto de ser lanzado en la batalla que ha sido, hasta ahora, frenada por Dios.

Una vez que este período de cinco meses termine y este primer “ay” llegue a su fin, los Estados Unidos y las otras naciones dispersas de Israel comenzarán su colapso. Lo que nos llevará rápidamente a un último conflicto nuclear, desencadenado tal como se describe en la Sexta Trompeta (el segundo “ay”). La Quinta Trompeta es el primer “ay” y es de veras el preludio de la Tercera Guerra Mundial.