Ronald Weinland

Ahora miramos adelante, a la Fiesta del año que viene, y ya estamos haciendo planes, mucho antes que de costumbre. Han pasado muchas cosas, y esto nos han llevado a tomar algunas decisiones rápidas para la próxima Fiesta. Es evidente que Dios y Cristo nos están preparando para una Fiesta mucho más grande todavía, en el próximo año. ¡Y la última entrada, que acaba de ser publicada, sobre un “Año de Dedicación”, debería hacernos ver que la Fiesta del año que viene va a ser una Fiesta aun más impresionante!

Cuando llegue el momento de la Fiesta la Iglesia estará mucho, mucho más fuerte espiritualmente. El crecimiento y las bendiciones que las personas experimentarán, junto con la increíble importancia del momento en el que estaremos entrando, harán con que la Fiesta de los Tabernáculos del 2015 sea la más importante que hemos celebrado desde que se formó la Iglesia remanente. Por las fechas de la Fiesta vamos a estar en el apogeo del “Año de Dedicación”, y seremos testigos de los frutos que “este año” habrá producido.

Los sitios para la Fiesta
Estamos centralizando muchos de los sitios para la Fiesta este año que viene. Como resultado de esto la Iglesia estará ayudando a los que serán más afectados por la necesidad de viajar más lejos para poder acudir al sitio más cercano a ellos. Sin embargo, no todos recibirán esa ayuda. Algunos sólo recibirán ayuda para el viaje, pero no lo suficiente para cubrir todos los gastos que tendrán que hacer. Esta información está siendo dada con bastante antelación para que usted pueda empezar a hacer planes, para que pueda comenzar a ahorrar o buscar un trabajo extra, y asegurarse de que usted pueda asistir a la Fiesta.

Somos conscientes de que centralizando los sitios para la Fiesta habrá más personas que no podrán asistir a la Fiesta este año que viene debido a la edad y/o problemas de salud que dificultan la movilidad de uno. Sin embargo, Dios bendecirá más a esas personas, dándoles ayuda y fortaleza espiritual en su esfuerzo para absorber todo lo que puedan de los mensajes de la Fiesta.

Para los que tengan que viajar largas distancias: no haga reservas de billetes aéreos con antelación, a menos que usted tenga el dinero para pagarlos. Porque si usted tiene que cambiar sus planes o si usted no recibe la ayuda (financiera) suficiente, las compañías aéreas no le devolverán el dinero de los billetes. Las inscripciones para la Fiesta se abrirán pronto. Esperemos que la información sobre todos los sitios para la Fiesta esté disponible antes de finales de este año en el sitio web. Y entonces usted puede comenzar a hacer las reservas de alojamiento.

Si alguien desea asistir a la Fiesta en otro país, debe hacerlo sin recelos. Estoy diciendo esto porque en el pasado ha habido cierta reticencia en lo que se refiere a viajar lejos de casa, debido a la incertidumbre acerca de cuándo la tribulación empezaría, lo que podría impedir a uno de regresar a casa. Después de la última entrada debe quedar claro que la destrucción física como consecuencia de las trompetas no puede comenzar hasta después que el Año de Dedicación haya terminado.

Aquellos que planean viajar a la Costa de Oro en Australia, deben reservar alojamiento lo antes posible, porque hay otras actividades que están siendo organizadas en esa región por las mismas fechas, y hay pocos alojamientos disponibles. Si usted tiene planes de ir a Australia, póngase en contacto con Wayne Matthews de inmediato, y él le dará la información necesaria sobre la ubicación del sitio de reunión y de los hoteles.

Hemos decidido que no se organizará la Fiesta en Nueva Zelanda este año. Sólo habrá una Fiesta de los Tabernáculos en Australia, en la Costa de Oro, para todos en esa región del mundo.

También en Europa sólo habrá un sitio donde la Fiesta será organizada. Y esto será en los Países Bajos. No se organizará la Fiesta en el Reino Unido.

El sitio en la región de las Cataratas del Niágara, en Canadá, seguirá siendo el mismo. Y para todos los Americanos que quieran asistir la Fiesta en ese sitio, por favor, tengan en cuenta que ustedes deben tener su pasaporte en orden, para poder cruzar la frontera con Canadá.

Sólo habrá un sitio en los Estados Unidos donde la Fiesta será organizada, y esto será en la región de Cincinnati. Será en el mismo sitio que el año pasado, salvo que por las fechas de la Fiesta todo el hotel habrá sido renovado. No se organizará la Fiesta en Hawái o en cualquier otra región de los EE.UU.

Esto hace con que sólo haya cuatro sitios de Fiesta entre los cuales usted puede elegir para este año que viene: la Costa de Oro en Australia, los Países Bajos, Canadá, y en Cincinnati. Así que, hay algunas decisiones que usted tendrá que tomar para este año que viene. Tenemos pensado abrir las inscripciones para la Fiesta a finales del año, y pedimos que todos se inscriban lo antes posible, para que lo podamos planificar. Las personas que no se inscriban lo antes posible, y que soliciten ayuda para asistir a la Fiesta, no recibirán esa ayuda. Es necesario que todos se inscriban lo antes posible.

Organización del Ministerio
Un otro asunto del que queremos que la Iglesia sea consciente es que vamos a empezar a hacer unos cuantos cambios en la estructura del ministerio. Hay varias razones para esto. Y todos tienen que ser conscientes de esto porque estaremos informando sobre ello a la Iglesia durante el próximo año, cuando los cambios más importantes hayan tenido lugar. La Iglesia tiene que saber quienes son parte del ministerio en su región, y por eso vamos a estar actualizando esta información, cuando sea el momento de hacerlo.

El ministerio está comenzando a ser sistematizado y organizado de modo a poder preparar mejor a todos para lo que tenemos delante de nosotros, incluyendo el Milenio. Algunos de estos cambios ya han comenzado. Un cambio importante tiene que ver con la preparación de la estructura de la Iglesia inmediatamente después de que entremos en el milenio. Aunque no me había dado cuenta de esto en el momento en que esta ordenación tuvo lugar, para mucha gente la reciente ordenación de un tercer profeta en la Iglesia les hizo darse cuenta de que esto podría significar que una mujer, si ella no forma parte de los 144.000, podría ser el cabeza físico de la Iglesia al comienzo del Milenio, tal como yo lo soy ahora, como un apóstol, el cabeza físico de la Iglesia bajo Jesús Cristo. Es prudente señalar aquí que Dios está preparando a alguien para ese papel, y esa persona será alguien bien entrenado e instruido para ello.

Nuestro enfoque desde el 2008, cuando el ministerio empezó a crecer, era el Pentecostés del 2012, el momento de la venida de Cristo. Este enfoque para el ministerio también abarcaba todo el trabajo que iba conllevar el increíble aumento en las peticiones de bautismos. Ese aumento sería el resultado de más y más personas que se convirtiesen, cuanto más el mundo se viera inmerso en la tribulación del tiempo del fin, y el regreso de Cristo se acercase.

Seguramente que este momento aún vendrá. Habrá mucho trabajo para el pueblo de Dios antes del regreso de Cristo, y mucho más después de Su regreso. Pero muchas cosas han pasado desde el 2008. El hecho es que todos en el ministerio han envejecido en ese proceso, y los que ya eran mayores en muchos casos están debilitados físicamente, e incluso incapacitados para el trabajo, debido a la dificultad de desplazarse y las enfermedades que a menudo achacan a uno en el proceso de envejecimiento.

Vamos a aminorar las tensiones y las posibles exigencias (que se multiplicarán poderosamente una vez que comience la tribulación) que recaen sobre algunos miembros del ministerio, porque ya no vamos a requerir su servicio en el ministerio. En algunos casos un elder pasará a ejercer la función de un elder asociado, o un sénior elder la de elder. Usted lo puede comparar a una reducción de una jornada laboral completa a una jornada parcial, o incluso a una jubilación por razones de edad o salud.

Para algunos este cambio (disminución) de su papel en el ministerio será el resultado de otras cuestiones ministeriales, porque la “necesidad real” en una determinada región ha cambiado. En algunos casos, las cosas que van a suceder en el futuro y cuando esto tendrá lugar, han cambiado. Sólo Dios y Cristo saben cuando esas cosas pasarán, y Ellos guiarán al gobierno de Dios para hacer esos cambios. Esto es una cuestión de la dirección y de la voluntad de Dios, del mismo modo que cuando una persona es ordenada o ascendida a un puesto de mayor responsabilidad.

Y finalmente, también habrá algunos cambios en el ministerio que se producirán debido a la corrección que está siendo dada a una persona, y el papel del ministerio ya no encaja en la vida de esa persona. Algunos otros cambios serán el resultado de las “necesidades personales” en la vida de una persona, y en ese momento específico es más importante para esa persona hacer frente a ellas que su papel en el ministerio.

Hay sin embargo otras cuestiones, necesidades y propósitos para algunos cambios que sólo Dios y Cristo saben y tiene el control sobre ellos. Esto tiene como objetivo moldear y formar a la Iglesia a través de diversas experiencias, preparación, etcétera. Cuando ese sea el caso, sólo Dios y Cristo pueden realizar (llevar a cabo ese trabajo): un mayor crecimiento y transformación en la vida de las personas que están siendo preparadas para las diferentes plazas en el cuerpo (lugares específicos dentro del templo), y esto requiere diferentes circunstancias en sus vidas.

La conclusión es que uno no tiene que estar en el ministerio, ni tampoco permanecer en el ministerio, para adquirir ese tipo de experiencia, crecer, aprender, y ser transformado; que es lo que Dios está haciendo en cada persona para que ellas puedan ser una parte específica de la Familia de Dios. Todos somos diferentes y todos estamos siendo preparados para diferentes plazas dentro del templo. No cabe a nosotros cuestionar a Dios. Nos cabe someternos al proceso y al fenómeno de tal llamado. Tampoco nadie debe tratar de averiguar el porqué cualquiera de estos cambios están teniendo lugar, porque esto viene de Dios y de Su Gobierno. Esto no está abierto al juicio de nadie, a menos que uno quiera ser culpable de juzgar a Dios.

La siguiente entrada será el comienzo de una nueva serie de entradas titulada: Una Mayor Dedicación.