Ronald Weinland

Desde el Pentecostés del 2013, la Iglesia no ha estado viviendo la manifestación del “cumplimiento físico” del Día del Señor. A la Iglesia de Dios fue dado a conocer que a partir del Pentecostés del 2012 hasta el Pentecostés del 2013 se produjo la manifestación del “cumplimiento espiritual” del Día del Señor.

Al seguir avanzando, de Pentecostés a Pentecostés, Dios nos ha ido guiando más plenamente a la verdad y al entendimiento acerca del tiempo en que vivimos, y acerca de aquello por lo que estamos pasando ahora.

En estos últimos 5 años y medio la Iglesia de Dios ha pasado por uno de los períodos más singulares de sus 2.000 años de historia. Un período de pruebas y dificultades, refinamiento y limpieza, y la revelación de la verdad; y también de mucho crecimiento espiritual. Hemos hablado de esto en la serie de entradas 4 años y medio Extraordinarios; y ahora, un mayor entendimiento nos está siendo dado acerca del año que siguió a esto, y que ahora ya casi ha terminado; y también acerca de lo que aún tenemos por delante.

A medida que la Iglesia se ha ido acercando rápidamente al período del Milenio, Dios nos ha ido dando una cantidad cada vez mas grande de la verdad y de la comprensión. Sobre todo desde la manifestación de la Apostasía, que ocurrió el 17 de diciembre de 1994. Mucho de esa verdad nos ha sido dado después que esos específicos eventos habían tenido lugar. Fue después que esos hechos tuvieron lugar que Dios nos reveló la conexión entre ellos, su cumplimiento y su significado.

Por ejemplo, fue después de la Apostasía, y a causa de la Apostasía, que Dios comenzó a revelar muchas cosas a la Iglesia que nosotros antes no sabíamos. Nos fue revelado que la “Apostasía” mencionada en 2 Tesalonicenses había ocurrido, y que ésta era la “más importante señal” de que una cuenta atrás para el regreso de Cristo había comenzado. Además, Dios nos reveló que fue entonces que el Primer Sello del Apocalipsis ha sido abierto. Pero, ¿cuántos realmente aceptaron que esta profetizada Apostasía de veras había ocurrido, y que Dios estaba claramente revelando esto a Su Iglesia? ¿Qué otra, aunque remota, posibilidad existía para que esta clase de devastación y masiva dispersión pudiesen tener lugar, y es que realmente tuvieron lugar, en la propia Iglesia de Dios?

No obstante, hay algunas organizaciones que están dispersadas que todavía creen que la Apostasía aún no ha ocurrido. Y creen que “su” iglesia tiene que ser mucho más grande de lo que era la Iglesia de Dios Universal (con cerca de 96.000 miembros bautizados), antes que una apostasía pueda tener lugar. Ellos se basan en la creencia de que cuando Cristo regrese deben haber 144.000 miembros bautizados, que sean fieles y que todavía estén vivos, para ser resucitados en el gobierno de Dios. Esto significaría que la Iglesia tendría que ser mucho más grande que eso, tendría que tener muchas decenas de miles de miembros, para que después de una apostasía aún quedasen 144.000 fieles. Estos grupos que están dispersados no entienden que este número (144.000) es un total de todos aquellos con quienes Dios ha estado trabajando en los últimos 6.000 años, preparándolos para hacer parte de ese gobierno.

Pero, ¿quién ha aceptado que hubo una Apostasía, y que ésta fue encabezada por el hombre que “se sentaba” (del griego: “sentarse” en autoridad, estar a la cabeza de un gobierno) en el templo de Dios (como si él fuera el propio Dios), y que se convirtió en el profetizado “hombre de pecado” e “hijo de perdición”? Este hombre se hizo “como Dios”, que es el único que establece la ley. Y ha cambiado las leyes de Dios a leyes que eran más de su propio gusto. ¿Quién ha creído de veras, ha entendido y reconocido plenamente, que ha sido este hombre, Joseph W. Tkach, padre, quien perpetró, y cumplió, estas cosas en contra de Dios y de Cristo – y se convirtió en el “principal anticristo” de todos los anticristos?

Cuando Dios empezó a revelar lo que sucedió a Su Iglesia, Él también comenzó a revelar el cómo y el porqué esto había ocurrido. Dios nos reveló que todos en la Iglesia eran laodiceanos, y que la Iglesia se había vuelto tan tibia que se había quedado dormida; y por eso fue completamente vomitada de Su boca, tal como Él dijo que pasaría. Sin embargo, ¿quién de entre los que están dispersados ha reconocido que era parte de los laodiceanos? La respuesta a todas estas preguntas es: ¡solamente la verdadera Iglesia de Dios! Sólo aquellos que están espiritualmente despiertos y vigilantes, y que se mantienen así, pueden escuchar la voz de Cristo, (re)conocer la verdad, y seguir a Él.

Nosotros queremos saberlo
Estamos viviendo lo que todos los que han venido antes de nosotros fielmente han vivido. Nosotros también queremos saber cuando el Mesías establecerá el Reino de Dios. Cuanto más crecemos espiritualmente, cercados por un mundo que rápidamente se vuelve cada vez más corrupto e inicuo, más fervientemente deseamos que esta era llegue a su fin, y que Cristo empiece Su reinado. Estos sentimientos se intensifican porque sabemos que ahora estamos viviendo en una época donde ya se ha abierto el último Sello del Apocalipsis, y que sólo estamos a la espera de la manifestación física de la Segunda Trompeta.

Todo esto me recuerda una tarjeta postal que me fue enviada por uno de los senior elders. En esa tarjeta ella expresó este sentimiento de ansiosa espera por estas cosas de una manera muy ocurrente. Ella usa una expresión muy conocida de los padres que alguna vez han viajado con niños pequeños. Porque como ella escribió en la tarjeta postal que me envió, los niños suelen preguntar una y otra vez: “¿Ya hemos llegado?”. También nosotros, los hijos de Dios, podemos hacer algo muy parecido, porque queremos terminar este viaje lo más pronto posible, ya que no queremos tener que seguir más lejos para llegar a nuestro destino, porque el viaje no es de lo más cómodo. Pero nosotros aún no hemos llegado, y tenemos que seguir más lejos.

Todos conocemos el ejemplo de Daniel, que quería saber de Dios sobre el final (el cumplimiento) de las cosas que él mismo había escrito acerca de la venida del Mesías y del establecimiento de Su Reino en la tierra. A Daniel se le dijo simplemente que sellara el libro (que no le concernía conocer el significado, ni el momento), ya que sus palabras iban a permanecer cerradas (selladas, sin revelarse) “hasta el tiempo del fin” (Daniel 12:9).

En los últimos años Dios ha estado abriendo (desprecintando, revelando) el significado de esas mismas cosas – no todo a la vez, pero poco a poco, de manera progresiva. Para entender mejor lo que hemos vivido (lo que hemos pasado) durante el período de los 1.335 días, desde la Fiesta de las Trompetas del 2008 (el 30 de septiembre) hasta el Pentecostés del 2012, y en el año que siguió, y después en el presente año que está llegando a su fin, es necesario abordar las diferentes maneras y métodos a través de los cuales Dios ya ha revelado tantas verdades a Su Iglesia. Hay muchas “variantes” en la manera que la palabra de Dios es escrita para revelar la verdad, el significado y propósito de Su plan, y cómo Su plan se está cumpliendo en la creación de ELOHIM – el Reino de Dios. La Biblia está repleta de ejemplos de estas “variaciones”; incluyendo el uso de dualidad, tipología (simbolismo), paralelos y dualidades físicos y espirituales, el cumplimiento repetido, el cumplimiento progresivo, la presente verdad, y mucho más.

Estos ejemplos incluyen también la comparación de cosas como la iglesia en el desierto (el Israel físico en el desierto) con la Iglesia de Dios en este mundo, en un desierto espiritual; Egipto es comparado a la esclavitud espiritual (la servidumbre), al pecado y al orgullo; Faraón es una tipología de Satanás; la levadura es un símbolo del pecado; llevar cilicio es un símbolo de humildad; la circuncisión física es un símbolo de la circuncisión espiritual del corazón, etc.

Hay una dualidad en la desolación del templo físico por Antíoco Epífanes (una abominación que trajo la desolación) y la desolación del templo, la Iglesia, por el hombre de pecado, el hijo de perdición. El Jardín del Edén físico de Adán y Eva es una tipología del Edén espiritual de Dios (en el reino espiritual).

Luego están las variantes del cumplimiento repetido, como con las muchas generaciones (y eras) de la Iglesia que experimentan el cumplimiento de la parábola de la semilla y de la parábola de la cizaña. Muchos pasajes de las Escrituras se refieren a las repetidas veces que a lo largo del tiempo, los profetas de Dios, los apóstoles, y el pueblo de Dios, son tratados por los gobiernos, con crueldad e injusticia (encarcelamientos, palizas y ejecuciones), generación tras generación.

Mucho del cumplimiento progresivo de la profecía se refiere especialmente a las cosas que se cumplirán durante este tiempo del fin. La profecía de Joel, que fue citada por Pedro en el primer Pentecostés de la Iglesia, es un excelente ejemplo de tal proceso. Debido a su incapacidad para comprender el milagro de hablar (y oír) en diferentes idiomas, algunas personas habían llegado a la conclusión de que los discípulos estaban borrachos; y Pedro entonces citó lo que el profeta Joel había escrito acerca de este acontecimiento.

“Porque éstos (los discípulos) no están borrachos, como vosotros pensáis (suponéis), siendo la hora tercia del día (las 9:00 de la mañana). Pero esto es lo que fue dicho por el profeta Joel: Y será en los postreros días, dice Dios, que derramaré de Mi espíritu sobre toda carne (y esto ha sido el comienzo del cumplimiento de esta profecía). Y vuestros hijos y vuestras hijas profetizarán (van a poder hablar con inspiración del plan profético de Dios), y vuestros mancebos verán visiones (podrán ver y presenciar lo que Dios ha profetizado mediante visiones a otros), y vuestros viejos soñarán sueños (los que se han hecho mayores y murieron, serán resucitados a la vida, y entonces podrán vivir la vida con la que siempre han soñado, y que no pudieron vivir en su primera vida). Y de cierto sobre Mis siervos y sobre Mis siervas en aquellos días derramaré de Mi espíritu (Dios da Su espíritu a todos a quien Él llama), y profetizarán (hablaran de la palabra de Dios con inspiración, verdad y entendimiento). Y daré prodigios arriba en el cielo, Y señales abajo en la tierra, Sangre y fuego y vapor de humo (estos son los acontecimientos del tiempo del fin que marcarán el comienzo del gran cumplimiento del derramamiento del espíritu de Dios sobre toda carne). El sol se volverá en tinieblas, y la luna en sangre, antes que venga el día del Señor, día grande y esplendoroso.” (Hechos 2:15-20).

Esto es un “cumplimiento progresivo”, porque sólo una parte de esta profecía de Joel fue cumplida en aquel entonces – esto fue sólo el comienzo. Él se refirió a lo que sucedería en los últimos días. La profecía de Joel no se refería solamente al tiempo del fin, el tiempo en que estamos viviendo ahora, sino también a lo que acababa de empezar a se cumplir en aquel momento específico, dando inicio entonces a los “últimos días” que seguirían en los próximos más de 2.000 años. Esto fue de hecho el comienzo de los últimos días del plan de 7.000 años de Dios (ya se habían pasado 4.000 años en aquel entonces).

Combinaciones de estas variantes son también usadas con profusión en la palabra de Dios, como por ejemplo en las profecías concernientes al “Elías que vendría”, donde se usan tanto el cumplimiento progresivo como el cumplimiento repetido. Estas variantes parecen interminables en las Escrituras, porque Dios ha elegido usar muchas maneras para revelar Él mismo, y Su plan, Su propósito, Su verdad, a los que Él llama. Y a través de esta misma clase de variantes y combinaciones, Dios ahora está revelando más a Su Iglesia, acerca de dónde hemos estado, dónde estamos ahora, y hacia dónde vamos.

Cambiar y Seguir a Dios
Hay tantas cosas que Dios de pronto ha comenzado a revelar, que será difícil entender, resumir y explicar debidamente todo en una sola entrada. Esto podría ser escrito más extensamente, y tratado en mayor profundidad, en una serie de entradas, pero como el próximo Pentecostés se acerca rápidamente, lo mejor es que esto sea escrito ahora.

Dios todavía no nos está revelando el momento específico de todo lo que ahora va a ser abordado, pero Él nos está dando un trazado más claro de los acontecimientos que hemos estado presenciando desde la Fiesta de las Trompetas del 2008, y de lo que ahora tenemos ante nosotros. En todo esto, es importante recordar que hay importantes razones por las que no todo nos es revelado completamente, y de una vez. Parte de esto sirve como preparación, y para poner a prueba a los que se someten a Dios. Pero además sirve para crear una fe y un carácter más firmes en ellos; para desarrollar en ellos una humildad más verdadera y más fuerte. Y también tiene que ver con la guerra y las estrategias espirituales. En todo esto, es bueno recordar que gran parte de las batallas que han tenido (y siguen teniendo) lugar en el reino angélico a lo largo del tiempo, se están acercando a un crescendo, y pronto llegarán al fin. Y Satanás y los demonios serán finalmente confinados, quedando completamente sin poder, durante los próximos 1.100 años.

Si queremos comprender mejor hacia donde Dios nos está guiando, primero debemos tener un sólido entendimiento de nuestra historia reciente, y de cómo Él ha estado trabajando con nosotros. Las decisiones que tomamos y las elecciones que hacemos en nuestra vida, en lo tocante a cómo seguimos a Dios, siempre se basan en la “presente verdad” (la verdad que Dios ha revelado a nosotros hasta un determinado momento). Dentro de esta variante normalmente nos enfrentamos a cambios, cuando Dios revela más de la verdad y de la profecía, progresivamente, como Él lo hace. Nuestras decisiones y elecciones también deben cambiar en consecuencia cuando eso sucede, porque son en momentos como estos que debemos estar determinados a seguir a Dios en la dirección que Él nos conduce. Es por eso que siempre hemos de vivir por la presente verdad (en respuesta a ella, de acuerdo con ella), y cambiar nuestras vidas para estar en armonía con ella.

Tales decisiones son fáciles de entender gracias a los muchos y recientes ejemplos que tenemos. Muchos de ellos han sido abordados antes, pero hay un ejemplo de gran y destacada importancia sobre los sucesos del 2008, que hay que ser abordado aquí una vez más.

Dios me había inspirado a escribir un segundo libro, y me ha guiado a dar a ese libro un título muy específico: 2008 – Testigo Final de Dios. Dios había revelado que el año 2008 era el año en que los dos testigos deberían empezar su testimonio, y que también era el año en el que Dios iba “establecerlos” como Sus dos testigos. En el 2008 empezaría una cuenta atrás muy concreta, que abarcaría los períodos proféticos de 1.335, 1.290, y 1.260 días. Cuando Dios reveló esa presente verdad, yo he tomado decisiones y he hecho elecciones con base en esa revelación.

Mirando hacia atrás, ahora puedo entender, que como un apóstol, la conclusión que yo primero he sacado de esas cosas que me acababan de ser reveladas, en combinación con las demás creencias que teníamos entonces, fue que todas estas fechas proféticas terminaban en el regreso literal de Cristo. Dios podría haber revelado que esto no era así, pero estaba dentro de Su propósito en establecer a Sus testigos, que ese debería ser su enfoque, y que ellos deberían creerlo, en obediencia. Por lo tanto, la conclusión fue que el regreso de Cristo tendría que ocurrir en la Fiesta de las Trompetas del 2011. Sin embargo, como ya ha sido abordado en la serie de entradas de mayo del 2013, 4 años y medio Extraordinarios, esa fecha del 2011 fue modificada para que pudiésemos seguir a Dios en una nueva verdad que Él nos reveló en aquel momento. Sería bueno citar esto aquí.

“En el Día de Pentecostés del 2008, Dios comenzó a revelar más. El orden de los acontecimientos estaba a punto de cambiar, ya que Dios comenzó a revelar que el momento para la ofrenda de los dos panes mecidos tenía la misma importancia que el momento para la ofrenda de la Gavilla Mecida, que Jesús Cristo cumplió a la perfección, de acuerdo con el tiempo de Dios.”
…

“Así, en aquel sermón, Dios reveló que Cristo no iba a regresar en una Fiesta de las Trompetas, sino que en un Día de Pentecostés. Ese fue un momento crucial en el plan de Dios, en lo que se refiere al cumplimiento de la ofrenda de los panes mecidos, que son ofrecidos ante Dios, representando Su aceptación de los 144.000. Esto tiene la misma importancia que la aceptación de la ofrenda de la Gavilla Mecida, durante los Días de los Panes sin Levadura, cumplida por Jesús Cristo. Entonces, tan pronto como Dios nos reveló la verdad que el regreso de Cristo es en un día de Pentecostés, nosotros cambiamos las fechas en nuestra comprensión anterior del orden de los acontecimientos. Como resultado de este entendimiento, el comienzo de los 3 años y medio de testimonio se aplazaba por casi 8 meses, empezando a finales del 2008 en lugar de a comienzos del 2008.”

Después que Dios reveló esta verdad a la Iglesia, que Jesús Cristo volvería en un Pentecostés, todo entonces se encajó de una manera muy inspiradora, porque los 1.335 días a partir de la Fiesta de las Trompetas del 2008 (que están relacionados con el sellado final de los 144.000) terminaban exactamente en el Día de Pentecostés del 2012. Esta era entonces nuestra presente verdad, y nosotros hemos actuado (respondido) a consecuencia, y nos hemos preparado para ello – con gran convicción. Gran parte de esto ya ha sido abordado en esa serie de entradas, por eso no voy a repetirlo aquí. Aunque el Pentecostés del 2012 no fue la fecha del regreso de Cristo, esta fue de veras la fecha en que se cumplieron las profecías que finalmente concluyeron el sellado de los que aún debían ser añadidos, para completar el número total de los 144.000. Ese día también fue la conclusión de un período en el que una “sentencia final” fue establecida.

Dios nos estaba guiando en lo que hemos vivido en aquel entonces; esto fue una combinación de “revelación progresiva” y de “nueva verdad”, que Él ha dado a Su Iglesia. Cuando algo así sucede, nosotros ajustamos nuestro curso, y cambiamos lo que hay que cambiar, para poder continuar a seguir a Dios en el camino que Él nos guía.

Sin embargo, no todos cambiaron “su” curso para poder continuar siguiendo a Dios. Durante ese período de 4 años y medio que se siguió a la Fiesta de las Trompetas del 2008, la mayoría de las personas en la Iglesia se han sometido a un proceso de refinamiento; y como resultado de eso, fueron más fortalecidas “en” Dios. Pero hubo quienes optaron por dejar de seguir a Dios y las increíbles 57 Verdades que Él ha dado a Su Iglesia. Y exactamente lo mismo se repetirá y seguirá pasando, a medida que avancemos en el período de tiempo que ahora tenemos delante de nosotros.

Antes de seguir con el siguiente punto, acerca de lo que Dios está revelando ahora, tengo que exponer ciertos hechos, para que nadie se confunda con la realidad y la verdad de estas declaraciones. Nosotros de veras hemos pasado por los 3 años y medio de un “último testimonio”, en cumplimiento de los 1.335, 1.290, y 1.260 días proféticos de Daniel. Además hemos pasado por el año que se siguió a esto, que fue la manifestación espiritual del “Día del Señor” para la Iglesia de Dios. Dios ahora nos está bendiciendo en poder seguir edificando sobre ese conocimiento y esa experiencia.

Y a título de aclaración (visto que algunos de nosotros parecen no entender bien lo que ha sido enseñado), hay un período de tiempo, tiempos, y mitad de un tiempo, que abarca 1.260 días – 3 años y medio – (donde un “tiempo” es un período de 360 días). Sin embargo, ese período de tiempo también tenía un significado y propósito “espiritual” en lo que se refiere a la “revelación del juicio de Dios”. Esto fue revelado al separar los primeros 280 días, que representaban un período de “juicio”. Y a esto se siguió un último recuento de un tiempo, tiempos, y la mitad de un tiempo, donde un “tiempo” entonces abarca 280 días (1). Este recuento correspondía al “juicio” de Dios, con testimonio durante todo ese período de tiempo.

Lo que Dios nos está revelando ahora, nos está siendo revelado a través de estas variantes de las que he hablado antes (y combinaciones de ellas).

Apocalipsis 11
En este capítulo de la Biblia Dios revela a dos testigos del tiempo del fin, que tenían una obra a realizar, una obra que Él había predeterminado para ellos. Esa obra ha sido sólo parcialmente concluida, y una obra mucho más grande está por venir. Dios Todopoderoso es muy ordenado, exigente, y exacto, cuando se trata de asegurar que las cosas que Él antes ha ordenado, mediante toda la profecía que Él ha inspirado a ser escrita, se cumplan exactamente como profetizado. El llamado, la formación, y la preparación de los dos testigos incluyen un proceso así. Esto se torna increíblemente emocionante cuando somos capaces de “ver” Su obra, y lo que Él metódicamente está cumpliendo.

Aclaración
Para no interrumpir el enfoque de lo que voy a escribir a seguir, primero tengo que mencionar algo acerca de una declaración que haré a continuación, en el segundo párrafo. Esta declaración es: “Hacia el final de este período de 3 años y medio, después del 14 de diciembre del 2008, que fue el comienzo del trabajo de los dos testigos y también fue cuando sonó la Primera Trompeta, tuvo inicio una fase final en la cuenta atrás para el regreso de Cristo…”. Hay que decir que en aquel momento nosotros creíamos que Cristo regresaría en el Pentecostés del 2012. Sin embargo, hemos aprendido que ese claramente no fue el caso; pero quisiera dejar bien claro que el día 14 de diciembre del 2008 fue una señal importante de la precisión en la fase final de la cuenta atrás para la venida de Cristo. El 17 de diciembre de 1994, cuando el Primer Sello fue abierto, empezó realmente la cuenta atrás para el regreso de Cristo. Dios ahora está comenzando a revelarnos más acerca de la fase final de esta cuenta atrás para la venida de Cristo.

Apocalipsis 11 (continuación)
Al igual que con lo que pasó con la Apostasía, cuando nosotros en aquel entonces no entendimos lo que estaba sucediendo hasta bien después de que esto hubiese ocurrido, y luego Dios abrió (reveló) Su palabra para que pudiéramos ver cómo esto se aplica a ese momento y lo que había pasado a Su Iglesia. De una manera similar, Dios ahora está revelando más en Apocalipsis 10 y 11, acerca del trabajo de los dos testigos.

Nosotros no hemos comprendido el profundo significado del título del libro, 2008 – Testigo Final de Dios, hasta mucho después que el libro había sido escrito. Hacia el final de ese período de 3 años y medio, después del 14 de diciembre del 2008, que fue el comienzo del trabajo de los dos testigos, y también fue cuando sonó la Primera Trompeta, tuvo inicio una cuenta atrás para el regreso de Cristo. Y especialmente en el año que siguió a esto, nosotros hemos podido “ver” que un poderoso “último testimonio” había sido establecido contra este mundo, porque el mundo sigue sin querer dar oídos a Dios, al igual que en los últimos 6.000 años. Tal “testimonio” tenía que ser establecido en esta “presente generación” del ser humano, para que el justo juicio de Dios pudiese ser establecido acerca de aquello que Él está a punto de traer sobre esta tierra.

Dios también estableció un “último testimonio” contra Satanás, para que Su justo juicio pudiese quedar firmemente establecido en esta generación, acerca de lo que ahora debe ser ejecutado en contra de Satanás y de los demonios.

También hemos podido entender cómo Dios estableció un “firme testimonio” en la Iglesia. De hecho, hemos “visto” que la obra (trabajo) de los dos testigos durante estos 3 años y medio era en un plano espiritual, como un “testimonio” que ellos establecieron. Esa fase espiritual tuvo que ver con la Iglesia. También tuvo que ver con aquellos que una vez han sido parte de la Iglesia de Dios, incluyendo algunas personas en el mundo, que odian a este último testimonio de Dios, y también a Sus dos testigos. Dios nos ha revelado la interpretación espiritual de Apocalipsis 11, en lo tocante a estos asuntos.

Pero Dios está revelando ahora que todo lo que fue escrito anteriormente en relación al cumplimiento del trabajo de estos dos testigos, también va a ser cumplido en un “plano físico”, tal como fue escrito sobre ellos en 2008 – Testigo Final de Dios. Se trata de una “dualidad” en el cumplimiento, cuya primera fase fue en un “plano espiritual”, y cuya segunda y última fase debe cumplirse en un “plano físico”.

En todo esto, hay plazos que Dios cumplirá con precisión, pero Él todavía no está “revelando plenamente” a la Iglesia cuándo esta última fase del trabajo final de estos dos testigos debe cumplirse. Y este será un trabajo que Dios cumplirá en un período de 1.260 días (3 años y medio). Dios todavía no está revelando plenamente a la Iglesia el momento específico en el que comienza esta fase física de la obra de Sus dos testigos.

Hay una importante dualidad que debemos considerar en el siguiente versículo: “Y daré á Mis dos testigos que profeticen por mil doscientos sesenta días, vestidos de cilicio.” (Apocalipsis 11:3). Hablaremos de esto más adelante en esta entrada, pero ahora es importante conocer esta dualidad. Este período de tiempo se aplica a la primera fase, la fase espiritual, en la que Dios estableció Su “ último testimonio”, y también confirmó Sus dos testigos. La confirmación de estos testigos era, y sigue siendo, una cuestión de formar (crear) un cierto nivel de humildad (vestirse de cilicio), necesario para llevar a cabo el tipo de obra que será realizada a través de ellos.

Ahora que todo esto está siendo revelado, puede que algunos se sientan desilusionados porque Cristo no va a regresar tan pronto como esperábamos; ya que de veras anhelamos intensamente Su venida y el establecimiento de un nuevo mundo. Pero nosotros hemos sido llamados a cumplir y encabezar algunos de los acontecimientos más dramáticos e importantes de todos los tiempos en el plan de Dios. Todavía tenemos una “gran obra” por delante, y Dios nos está revelando esta obra.

Este es un tiempo para armarse de más valor, y para estar más fuertes espiritualmente. ¡Dios nos está llamando a hacer más, mucho más! Quizá todo esto sea demasiado para algunos; y como siempre ha pasado, ellos no van a optar por continuar siguiendo y viviendo la verdad que Dios les ha dado. Sin embargo, tal elección en nada cambiará las luchas y batallas que aún tenemos por delante. ¡Y tampoco cambiará algo de lo que está por venir! Porque las condiciones en este mundo seguirán empeorando cada vez más.

De Pentecostés a Pentecostés
Durante el pasado año Dios nos ha dado una dirección a seguir, “de Pentecostés a Pentecostés”, para que pudiéramos seguir avanzando, de una manera más unificada y más espiritualmente centrada. Esto ahora cambia un poco, porque ahora casi hemos llegado al Pentecostés como Dios deseada que nosotros llegásemos (espiritualmente más fuertes). Y ahora que nos estamos acercando a este Pentecostés, Dios nos está mostrando cual debe ser nuestro enfoque en relación a la venida de Cristo. Pero en todo esto, todavía seguimos esperando por el Día de Pentecostés de la venida de Cristo.

Lo que ahora tenemos ante nosotros es una “obra” que debe ser llevada a cabo por los dos testigos de Dios y por la Iglesia. ¡No se trata de un testimonio que debe ser establecido, porque ya hemos pasado por eso! Lo que tenemos ante nosotros no es un testimonio pero “una gran obra”. Para la Iglesia, esta es una obra de apoyar, y sostener los brazos de los dos testigos de Dios. Para los dos testigos esta será una obra de declarar porqué los acontecimientos del tiempo del fin han venido sobre este mundo; y también será una obra de participar directamente en algunos de estos acontecimientos, para ejecutar la sentencia de un último testimonio que ya ha sido firmemente establecido.

A partir de ese momento ya no vamos simplemente a estar centrados en avanzar un año a la vez. Después de lo que ha sido afirmado acerca de una “gran obra” que tenemos ante nosotros, y la dualidad de los 1.260 días de los testigos de Dios, ahora debería ser obvio que Dios está revelando que aún nos queda un período mínimo de 3 años y medio, para que se cumpla la dualidad de la “fase física” de la obra de Sus dos testigos.

En todo eso es prudente recordar que nosotros voluntariamente hemos entregado nuestra vida a Dios en el bautismo, para servirle como Él quiere. Nuestra vida ya no nos pertenece, ya no podemos vivirla en el egoísmo – en las búsquedas egoístas en esta vida. De todos modos, tales búsquedas a lo mejor serán de corta duración, ya que este mundo se ha sumergido en los peores momentos de su historia. Sólo el diluvio en tiempos de Noé ha causado más muertes (porcentualmente) en la historia de la humanidad; pero esto ocurrió en un período mucho más corto de tiempo que el que está por venir. Yo le pido a Dios para que nosotros abracemos con entusiasmo esta gran obra que tenemos por delante, como Dios nos lo está mostrando. Hemos estado siendo preparados (PKG – Preparando para el Reino de Dios) para ese momento, y para lo que pasará en este mundo.

Además de revelar sobre esta fase final de los dos testigos, Dios también está revelando que hay otro período de tiempo que se va a cumplir. Mientras hablamos de algunos versículos en Apocalipsis, hablaremos también de esto. El tiempo que tenemos todavía por delante, antes de que comience la fase final de esta gran obra, es un período de tiempo para los últimos arreglos en el refinamiento y la preparación de la Iglesia para el cumplimiento de lo que aún tenemos por delante. Estamos en esto hasta el final – el final de esta era y el comienzo de una nueva era. Así que, vamos a considerar un poco más lo que Dios nos está dando.

Mientras escribo esto, no puedo dejar de pensar en el hecho de que Juan también fue encarcelado en la isla de Patmos por el gobierno en su tiempo, y que fue entonces cuando Dios le dio las palabras de Apocalipsis para que las escribiera. Y ahora que yo también he sido encarcelado por nuestro propio gobierno, Dios me está dando algo de la más reveladora comprensión de lo que estaba escrito acerca de esta gran obra que todavía tenemos por delante (todos nosotros en la Iglesia). Esta comprensión es muy precisa, y es específicamente sobre los dos testigos.

Apocalipsis 10
Hay un relato escrito en la Biblia donde Dios revela que dos testigos van entrar en la escena de los acontecimientos del mundo. Este relato comienza en Apocalipsis 10. Sólo la Iglesia los ha visto y aceptado (los testigos), pero su “principal trabajo” en los acontecimientos mundiales aún no ha sido revelado.

Las personas han insertado capítulos y versículos en las Escrituras, pero para que podamos entender lo que Dios nos está mostrando ahora, tenemos que ver a Apocalipsis 10 y 11 como un flujo de una historia continua que se despliega ante nosotros.

Todo comienza con Juan viendo a un ángel que tenía un pequeño libro en la mano. Las dos palabras, “pequeño” y “libro”, son una sola palabra griega que mejor se traduce como “librito” (pequeño pergamino). Sin embargo, mismo la palabra “librito” no capta plenamente el significado, o la intención, de aquello de lo que se está hablando.

En el contexto del episodio, el ángel con el librito (o pequeño pergamino) “abierto” se puso a clamar. ¿Qué ha dicho? Pregonó los Siete Truenos; y una vez que éstos habían sido declarados, Juan se dispuso a escribir lo que había oído acerca de ellos. Pero alguien dijo a Juan que no lo escribiera, sino que sellara lo que fue declarado. Esto es similar a lo de Daniel, cuando le fue dicho que las palabras que había escrito deberían quedar “cerradas y selladas hasta el tiempo del fin” (Daniel 12:9). En el caso de Juan, le fue dicho que ni siquiera escribiese lo que había sido claramente “expuesto” y declarado a él.

Hasta ahora Dios no había revelado la relación entre el “librito abierto” y los Siete Truenos que fueron declarados por el ángel, aunque esto siempre ha estado justo delante de nosotros. El ángel simplemente declaró, en voz alta, algo que estaba siendo “temporalmente mostrado” sobre los Siete Truenos. Juan sólo pudo escribir que él había “oído” lo que se dijo acerca de estos truenos, pero él tenía que “sellar” esto (cerrar lo que había sido abierto), y no le fue permitido escribir de que se trataban. Ellos tenían que ser abiertos (desprecintados) y escritos en otro momento en el tiempo – en este tiempo del fin. “Sella (cierra) las cosas que los siete truenos han hablado, y no las escribas.” (Apocalipsis 10:4).

“Y la voz que oí del cielo hablaba otra vez conmigo, y decía: Ve, y toma el librito (el pequeño pergamino) abierto de la mano del ángel que está sobre el mar y sobre la tierra.” (Apocalipsis 10:8). La narración sigue contando lo que Juan hizo, lo que el ángel le dijo que hiciera con ese pequeño pergamino que estaba abierto.

“Y fui al ángel, diciéndole que me diese el librito, y él me dijo: Toma, y trágalo; y él te hará amargar tu vientre, pero en tu boca será dulce como la miel.” (Apocalipsis 10:9). Juan tomó el libro y se lo comió. Entonces él dice: “y era dulce en mi boca como la miel; y cuando lo hube devorado, se amagaron mis entrañas.” (Apocalipsis 10:10).

Estos siete truenos han sido una vez más revelados por Dios a través de Jesús Cristo, y fueron escritos en el libro 2008 – Testigo Final de Dios. Este libro no fue lo que Juan comió; lo que él comió fue una pequeña parte de este libro que declara (resume) lo que son estos truenos. No fue todo el libro, pero sólo una pequeña y específica parte del mismo.

De hecho, cuando Dios me reveló los truenos, e incluso me otorgó cierta libertad para añadir más detalles a ellos, fue una experiencia emocionante poder recibir algo así de la mano de Dios. También fue emocionante saber que estos eventos tendrían mucho que ver con una gran obra, que finalmente pondrá fin a la era egoísta y rebelde del ser humano. Y la emoción fue aún más grande al poder comprender que esto sería seguido por una gran revelación de Dios a toda la humanidad.

Sin embargo, como el mensaje de estos truenos estaba directamente vinculado al “ultimó testimonio” de Dios a este mundo, sobre todo a medida que se aproximaba el año del 2012, la experiencia se convirtió en algo amargo de digerir (hemos catado del resultado de participar directamente, “de comer” de este mensaje). El “testimonio” de este mundo, de la Iglesia dispersada, e incluso de algunos en el entorno de la Iglesia, fue que el mensaje (junto con todo el libro) fue rechazado, ridiculizado y desacreditado. Para muchos en el mundo y en la Iglesia dispersada, esto era su evidencia, la supuesta evidencia, de que nosotros no éramos los dos testigos de Dios, y de que yo, con toda seguridad, no soy un profeta de Dios. Ellos se burlan diciendo que yo en lugar de esto soy un “aprovechador” de Dios (2); y lo mismo dice nuestro propio gobierno.

Todo esto ha pasado en función de un propósito más grande que Dios ha estado realizando, y mucho de esto tenía que ver con nuestro aprendizaje en vestirnos de cilicio – para ser más fuerte en la humildad. Cuanto más nos tornamos uno con Dios, más seremos revestidos de humildad. Cuanto mayor es la tarea – “trabajo” – que Dios da a una persona para cumplir a Su servicio, mayor es la necesidad estar en unidad, de ser uno con Dios, y también de crecer cada vez más en un espíritu de humildad. Ese es exactamente el proceso que Dios está usando para preparar a Sus dos testigos (y la Iglesia) para lo que aún está por venir. Las cosas por las que ellos han pasado, y por las que siguen pasando, los preparan para realizar el trabajo (tarea) que ellos deben cumplir en esos últimos 1.260 días.

Profetiza una vez más
Después que el ángel instruyó a Juan a comer el mensaje de los Siete Truenos, el ángel siguió dándole más instrucciones. “Debes profetizar una vez más delante de muchos pueblos, naciones, lenguas y reyes (líderes, gobernantes).” (Apocalipsis 10:11). Esta instrucción sigue directamente después de las cosas sobre los Siete Truenos, y lo de la dulzura que Juan ha experimentado en la boca y la amargura en su vientre al comer el mensaje. Ese mensaje ha sido proclamado al mundo, como un testimonio. Es una revelación de eventos que han sido profetizados y que obrarán “en contra de” las personas, naciones y líderes que no se arrepientan.

El mensaje de este ángel es acerca de la profecía que será profetizada una vez más. La palabra griega para “una vez más” conlleva la idea de una repetición que crece y disminuye alternativamente, con más o menos regularidad, e intensidad; y cuando se utiliza en el contexto de tiempo, significa literalmente “una vez más”. Todo el mensaje profético del libro 2008 – Testigo Final de Dios fue escrito y proclamado al mundo en siete idiomas. Ese mensaje ha sido proclamado a muchas personas, naciones y líderes (en casi todas las naciones), en muchos idiomas. Pero cuando ese mensaje sea proclamado “una vez más”, esto se hará de una manera mucho más multitudinaria.

El ángel le dijo que esta profecía tenía que volver a ser anunciada “delante” de muchos pueblos, naciones, lenguas y líderes. La palabra griega que se traduce como “delante” es más frecuentemente traducida como “en contra”, pero a menudo conlleva también la idea de estar “delante” de alguien, “en” su presencia. Esta parte del versículo está hablando simplemente de lo que debe ser cumplido “una vez más”, según lo que estaba escrito en el libro, sobre los acontecimientos profetizados que vendrán “en contra de” los pueblos, naciones y líderes – justo como está escrito sobre los Siete Truenos, y en el resto del libro 2008 – Testigo Final de Dios.

La primera vez que ese mensaje fue proclamado (mediante el libro que fue publicado), esto fue un mensaje “en contra de” este mundo, era un “testimonio contra el mundo” que primero tenía que ser establecido. La próxima vez (“una vez más”), esto será una cuestión del activo cumplimiento de estos acontecimientos, se trata de la ejecución efectiva de la sentencia en contra de este mundo. Esto será la manifestación real de todos los eventos físicos.

Además, varios de los eventos en contra de algunas personas, naciones y líderes serán pronunciados y rápidamente manifestados, si esto dos testigos así lo decidan y lo determinen. Esos eventos tendrán lugar solamente en la fase final de los 1.260 días de los dos testigos. “Estos tienen poder para cerrar el cielo a fin de que no llueva durante los días en que ellos profeticen; y tienen poder sobre las aguas para convertirlas en sangre, y para herir la tierra con toda suerte de plagas todas las veces que quieran.” (Apocalipsis 11:6).

Otro periodo de tiempo
Esta interacción entre el ángel y Juan es seguida por una última instrucción que es dada a Juan. En la historia de la Iglesia hemos podido ver muchas veces el repetido cumplimiento parcial de tales eventos. Pero hay un cumplimiento literal, final y completo, que Dios está revelando, y que tiene lugar en el “presente tiempo” en que vivimos.

“Y me fue dada una caña semejante á una vara, y se me dijo: Levántate, y mide el templo de Dios, y el altar, y á los que adoran en él.” (Apocalipsis 11:1).

El templo de Dios es la Iglesia, y durante este período de tiempo ella debe pasar por una fase final de limpieza, purificación, crecimiento, y preparación para poder “participar” en la gran obra que ahora está delante de ella. Esto se trata de una ejecución final de la sentencia que fue declarada – por Dios y Cristo – y que resulta en la efectiva medición de aquellos que están verdaderamente sometiéndose a Dios. Se trata de aquellos que suelen presentarse regularmente ante el altar de Dios, aplicando en su vida el sacrificio de Cristo como su Pésaj (buscando activa y continuamente el perdón de los pecados). Estos son los que buscan la misericordia y el verdadero cambio (transformación), para poder “permanecer en” (continuar en, habitar en) el templo para “adorar” a Dios en espíritu y en verdad.

“Pero no midas el patio que está fuera del templo; déjalo sin medir, porque ha sido entregado a los no creyentes, y ellos van a pisotear la ciudad santa durante cuarenta y dos meses.” (Apocalipsis 11:2).

¡Esto ya ha comenzado! Algunos de los que están en la Iglesia, pero que no están realmente “en” (viviendo espiritualmente dentro de) la Iglesia (en el templo de Dios), son los que están en el patio que está fuera del templo, y “aparentan” estar entre los que adoran “en” la Iglesia. Aunque esto es algo que incumbe a su homólogo para el tiempo del fin, Juan fue instruido a “echar fuera” (excluir de la comunión) tales individuos y contarlos (medirlos) como gentiles – como completamente no creyentes.

Este versículo concluye diciendo, “ellos” van a pisotear la ciudad santa (la Jerusalén espiritual – la Iglesia) durante cuarenta y dos meses. Este “ellos”, los que hacen esto, son muchos de aquellos que han sido “excluidos” de la Iglesia, excluidos de una comunión, que era falsa, que ellos tenían con el pueblo de Dios. Ellos han sido claramente expuestos por lo que son; ellos son los que están contra Dios, contra Cristo, y contra Su Iglesia.

La mayoría de estas personas, que son “excluidas”, son los que optan por pasar por encima (pisotear) de todo lo que Dios ha hecho sagrado – santificado espiritualmente. Esto incluye la práctica de la mentira, la calumnia, la media verdad mezclada con falsas historias, denuncias, la distorsión de la verdad de Dios, la burla, el ridiculizar, y muchas otras cosas que estos individuos hacen a la Iglesia de Dios.

Como acabo de decir, “esto ya ha comenzado”. Dios no ha revelado plenamente cuando esto comenzó, ya que esto puede haber comenzado en el Pentecostés del 2012 o del 2013. Estoy hablando esto como un apóstol de la interpretación de la “presente verdad” que Dios nos ha dado ahora. Por lo tanto, el año exacto aún no ha sido revelado plenamente. Además, Dios puede alterar el momento del cumplimiento, pero Él no va a cambiar los acontecimientos profetizados que Él ha revelado a Sus profetas.

Tres aclaraciones
1. Siete Truenos: En todo lo que ha sido abordado hasta aquí, la manifestación de los Siete Truenos necesita ser entendida. Cuando el Sexto Sello ha sido abierto algunos de estos truenos comenzaron a retumbar; y luego, en el 2008, ellos comenzaron a retumbar más intensamente. Y desde entonces ese proceso ha seguido aumentando en frecuencia e intensidad, con algunos de los truenos retumbando simultáneamente. Mucho de esto ha contribuido para cumplir el propósito de Dios en mantener a la Iglesia centrada y alerta durante esa difícil etapa, que fue un período más intenso de pruebas y dificultades.

Como ha sido dicho muchas veces en el pasado, los truenos seguirán aumentando en magnitud y frecuencia, incluso con varios truenos retumbando simultáneamente. Este es un proceso que en realidad se hará mucho más poderoso a medida que sigamos avanzando, a partir del próximo Pentecostés. El gran poder de estos truenos será manifestado durante el cumplimiento físico de los 1.260 días de los testigos de Dios.

2. La Primera Trompeta: Dios no va a revelar plenamente la comprensión sobre cada trompeta hasta después de la gran manifestación de lo que cada una de ellas produce. En el 14 de diciembre del 2008, ha sonado la Primera Trompeta.

Como ha sido dicho en el pasado, aquel no era el momento para la manifestación física de esta trompeta. Esta trompeta contiene una manifestación literal y física, que es de naturaleza profética; y conlleva una manifestación “proféticamente simbólica”. Esto es similar a la naturaleza profética del Primer Sello, que cuando ha sido abierto (relativo a la Apostasía), su efecto y la continua destrucción que trajo han seguido mientras el resto de los sellos han sido abierto, a lo largo de todo ese período de tiempo.

Con esta Primera Trompeta, el resultado de su efecto físico seguirá aumentando en poder destructivo a lo largo de todo el tiempo de la manifestación de cada una de las siguientes trompetas. Este es un proceso que continuará a desarrollarse hasta todo lo que fue dicho en relación a esta trompeta se cumpla completamente.

La destrucción “profética y simbólica” de esta trompeta empezó a manifestarse a partir del 2008. Esto está relacionado principalmente con la ruina del “billete verde” – el dólar americano – y con el total colapso económico, y con la destrucción de la productividad de los Estados Unidos. La realidad es que todo esto ya se ha venido abajo, pero está siendo sostenido (apoyado) por la falsa (engañosa) política económica, la ilimitada expansión monetaria, y la complicidad voluntaria en la participación de estas prácticas evasivas por las grandes empresas (industria), la banca, el gobierno, y también por los participantes del mercado de materias primas y del mercado de valores.

Esta profética, simbólica, destrucción de la Primera Trompeta no seguirá durante el período de todas las trompetas restantes pero se convertirá en su cumplimiento físico, antes de la manifestación de la Quinta Trompeta.

3. La Quinta Trompeta: Como ha sido dicho en el pasado, esta es la única trompeta que encierra un cumplimiento espiritual y uno físico. Esta trompeta trae cierta dualidad, tanto en un plano físico como en el plano espiritual. El cumplimiento espiritual de algunos de los versículos que describen esta trompeta estaba relacionado con la Iglesia, y esto ya se ha cumplido. La manifestación física de esta trompeta se producirá en su orden natural, después del cumplimiento de la cuarta trompeta.

El Último Gran Día del 2011
Por último, en esta última parte de esta entrada, voy a hablar de algo que fue dicho en un sermón en el Último Gran Día en el año 2011. Se trata de algunos preocupantes pensamientos que me vinieron a la mente, ya bien entrada la noche del Día de la Expiación (en el 2011), y que yo compartí con la Iglesia en aquel sermón del Último Gran Día.

Aunque esto podría ser abordado un poco más a fondo, voy a limitarme simplemente a citar algo de lo que yo dije en el sermón y a dar alguna aclaración sobre lo que esto implicaba. Mirando hacia atrás, a lo que he dicho en ese sermón y el momento increíble en el que Dios lo inspiró a ser dado, ¡esto me parece aún más profundamente inspirador ahora!

Ese sermón se titula “Un Tiempo de Circunspección”. Ese sermón habla del compromiso del pueblo de Dios de vivir Su camino de vida – Su verdad – con profunda y genuina convicción, sin importar lo que pase en nuestra vida.

Dios nos estaba preparando para lo que estaba por venir, lo que nos llevaría a ese día de Pentecostés; pero también nos estaba alentando a completar el “testimonio” que sería establecido en el 27 de mayo del 2012.

Voy a mencionar algunas partes de ese sermón:

“¡Ahora! Ahora es el momento de mirarnos a nosotros mismos, de ser sobrios, de mirar profundamente dentro de usted mismo, y considerar lo que usted cree. En el Día de la Expiación estábamos ayunando en Melbourne; y ya bien entrada la noche de ayuno, yo me desperté con unos pensamientos raros. Me vinieron a la mente unos pensamientos inusitados que ahora voy a compartir con ustedes. (Estos) pensamientos eran un tanto inquietantes, pero eran pensamientos sobre cuestiones que me han llevado a la comprensión de lo que Dios quería que yo abordara aquí hoy, para que yo pudiera hablar a ustedes acerca de ellos. Recuerden que les he hablado que yo ya he pasado por momentos así antes, que me he despertado en el medio de la noche, y que entonces Dios me ha revelado muchas cosas (que tienen) que ver con la Iglesia, y con hacia donde la Iglesia está yendo, y hacia donde Él está guiando la Iglesia. ¡Increíble! Es probablemente en momentos así cuando tengo mis pensamientos más claros, y al estar en un ambiente tranquilo y sin estrés, yo puedo escuchar un poco más cuidadosamente en mi mente.”

“El primer pensamiento que me vino a la mente fue: ‘El 27 de mayo de 2012 no es el día del regreso de Jesús Cristo’.”

Un par de párrafos más adelante, en la segunda parte, he afirmado:

“El segundo pensamiento que me vino a la mente, después de despertar en la noche del Día de la Expiación fue: ‘Tú aún no has empezado tu trabajo como testigo, como lo has supuesto; pero comenzarás a hacerlo una vez que estés completamente vestido de cilicio. Y el hecho que Cristo no va a regresar el 27 de mayo contribuirá a esto; porque las personas en el mundo van a odiarte mucho más que ahora’.”

Y en medio a todo esto, lo que yo he pensado fue que aún quedaban otros 3 años y medio que deberían ser cumplidos. Muchas otras cosas importantes ya me habían sido reveladas en medio de la noche, pero esta vez fue diferente, ya que “no parecía ser” lo mismo que en otras ocasiones. En cambio, en mi pensamiento, me vino una sensación de intranquilidad, porque esto no parecía estar siendo transmitido en el mismo espíritu que antes, pero parecía (yo tenía esa sensación) que el que lo estaba transmitiendo tuviera un cierto placer en hacerlo; era como si le diera mucho gusto entregar el mensaje. Dios no se expresa de esa manera, pero lo hace con paciencia, con amor, con claridad y con inspiración.

Lo primero que pensé fue que esto no venía de Dios, pero de Satanás. Yo estaba un poco confundido sobre todo esto, porque no entendía por qué Dios lo estaba permitiendo. Sé que un día voy a entender la verdad sobre todo esto, ya que mis pensamientos pueden haber sido mi propia reacción a la posibilidad de que Cristo no volvería en el 2012; pero no creo que ese sea el caso.

Quizá Dios permitió a Satanás transmitir aquel mensaje porque no era un mensaje completo. Esto era sólo parcialmente cierto en relación a los otros 3 años y medio que deben ser cumplidos, porque ahora sabemos que el período que sigue al año 2012 debe ser casi el doble que esto (o incluso un poco más). Voy a mencionar más partes de este sermón que hablan de esto:

“Cuando Jesús estaba ayunando, Dios permitió a Satanás que fuera a Él, y que intentara disuadirlo de la tarea que tenía ante Él, que intentara quitar el enfoque de Cristo de la obra que Él iba a cumplir. Pero Cristo contestó a Satanás con la palabra de Dios, con respuestas que son la verdad que Dios nos da para que vivamos según ella. Eso fue lo que Él hizo, de una manera poderosa. A veces somos atacados, y Dios permite que eso pase, como hemos escuchado en el sermón anterior.”

“Sí, yo creo que esto era un intento de Satanás de sembrar la duda, la confusión, la incertidumbre, la debilidad, y cualquier otra cosa que pudiera hacer para distraer, para desalentar, para atormentar, etc.”.

Un par de párrafos más adelante yo he afirmado: “Pero Jesús Cristo es mucho, mucho más poderoso que Satanás. ¡No hay comparación en esto, en absoluto! Él se burla de esto, y utiliza las artimañas del propio Satanás para fortalecer Su propio Cuerpo. Esto es algo muy poderoso. Satanás piensa que puede con Dios; él trata de causar problemas, de poner un bache en el camino. ¡Pero nunca lo va a lograr! ¡Nunca!”

Y hay una última cosa que debe ser citada de ese sermón:

“Y los pensamientos que me vinieron a la mente… ¡que montón de tonterías! Eso fue simplemente un montón de tonterías. ¿Otros 3 años y medio? Esto nos lleva a noviembre del 2015. Bueno, no hace falta ser muy listo para entender una gran verdad, de la que yo estoy tan profundamente convencido, la 50ª Verdad: Jesús Cristo regresa en un Día de Pentecostés.”

Así que, el párrafo que acabo de citar fue mi reacción, que se basa en la 50ª Verdad, a esos pensamientos en aquel momento. Esta es una “respuesta correcta” (basada en la verdad) a cualquier pensamiento sobre la posibilidad de que Cristo vaya regresar en noviembre del 2015. Esto nos ayudó a enfocarnos con mayor diligencia en el cumplimiento de un “gran testimonio”, que debía ser establecido por aquello que nosotros íbamos a “vivir” hacia el 27 de mayo del 2012.

Sin embargo, Dios de hecho estaba empezando a darnos más verdades, y a prepararnos para más verdades que iban a ser reveladas, a Su tiempo. Y esto es lo que hemos abordado en la presente entrada. Nosotros vamos a seguir adelante con un mayor enfoque (visión) todavía.

Para terminar, hay una cosa más que me gustaría contarles. Hace un par de semanas, y era otra vez en medio de la noche, yo me desperté con pensamientos muy claros sobre mucho del contenido de la presente entrada. Además me fue revelado que un tercer libro será escrito, y también el título de este libro me fue revelado. Esto me ha sido revelado de manera clara, y de la misma manera que otros nombres y títulos me han sido revelados durante estos años. Estos incluyen a: News Watch (para la Iglesia de Dios dispersada), El tiempo está se acabando, El tiempo se acabó, La Iglesia de Dios – PKG, El Profetizado Tiempo del Fin, y 2008 – Testigo Final de Dios.

[Reanudaremos la serie de entradas La Verdadera Comunión con la 14ª parte en un par de semanas.]

Notas del traductor:
(1.) 360 días x 3,5 años =1.260 días; 1.260 días–280 días = 980 días; 980 días ÷ 3,5 años=280 días.
(2.) Se trata de un juego de palabras: “prophet and profit”.